El secreto de la eterna juventud

Giuseppe Paterno lo ha vuelto a hacer. Si en 2014 se matriculó en Estudios históricos y filosóficos en la Universidad de Palermo y en 2020 obtuvo su título cum laude, ahora acaba de graduarse como Doctor Magistral en Ciencias Filosóficas, también cum laude. Lo aún más sorprendente es que Paterno tiene 98 años, nació el 10 de septiembre de 1923 en la isla de Sicilia. Así, reafirma ser el estudiante más longevo de Italia.

Durante los años 30, debido a la pobreza y formar parte de una familia numerosa, Paterno nunca pudo estudiar. Además, en 1942, fue llamado a filas en la Marina y se convirtió en operador de telégrafos. A finales de 1943, tras el desembarco aliado en Sicilia, fue contratado por los Ferrocarriles del Estado. Diez años después, ya casado y con dos hijos, se licenció como topógrafo y permaneció en activo hasta 1984. Jubilado, conoció en Siena a un filósofo que le abrió esta nueva vía de estudio.

El profesor Andrea Le Moli, su director de tesis, me describe al «joven» y «apasionado» estudiante. Paterno es «muy lúcido, a pesar de su edad». Le asombra su capacidad para enfrentarse a todos los apuros sanitarios y su resistencia en plena pandemia. Le Moli recuerda que redactó su tesis en una máquina de escribir y pegó, una a una, sus páginas. «Paterno siempre dice que el estudio, su pasión por los libros y la cultura, lo mantienen vivo, con una mente abierta y activa. Ha sido capaz de conservarse fresco y joven de ideas, incluso cuando su cuerpo está fatigado».

En la Universidad de Palermo están muy contentos y orgullosos de él. «Es la prueba viviente de por qué estudiamos, porque el pasado y el presente van intrínsecamente ligados y nos muestran formas de afrontar la vida».

Para el docente, es asimismo un ejemplo «para las nuevas generaciones. Los jóvenes de hoy están desilusionados y se dejan abatir por las dificultades. Sin embargo, frente a una roca como Paterno, todas las pequeñas crisis y ansiedades que podemos tener toman un peso diferente». Le Moli confiesa que ha aprendido de él a situar muchas cosas en la perspectiva correcta y a cultivar la esperanza de, si no llegar a los 98 años, al menos, «mantenerme lo más joven posible a través del estudio».

“Es una muy bella historia que aún no ha terminado. ¿Qué otras sorpresas nos deparará el señor Paterno?”, augura Le Moli.

De momento, su hijo confirma que está escribiendo con él un libro (a máquina) sobre Sicilia y que posiblemente en septiembre salga publicado.