Tribuna

El otro aire que ya respira Madrid

Cada una de las iniciativas que conforman la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 ha contribuido a fortalecer una inercia imparable, alejada ya de cualquier elemento o explicación coyuntural, en la mejora de la calidad del aire

El otro aire que ya respira Madrid
El otro aire que ya respira MadridRaúl

Madrid ya tiene otro aire. En su acepción más literal, sin metáforas. Tras el hito histórico que supuso haber cumplido en 2022 por primera vez con la directiva europea de calidad del aire, hoy podemos decir con orgullo que en 2023 acabamos de lograr nuestros mejores registros históricos. Y hemos vuelto a cumplir.

Pusimos en marcha hace ya cuatro años una ambiciosa estrategia: Madrid 360. Confiamos en ella sin vacilar. Sin que nos distrajeran los vaticinios apocalípticos lanzados desde un extremo ni los argumentos falseados arrojados desde el otro. Siendo conscientes de que el gran problema de la contaminación había que afrontarlo a partir de una visión integral, de ciudad, alejada de la dibujada por aquellos que, equivocadamente, entendieron que Madrid era sólo un distrito y actuando sobre las principales fuentes de emisión. Desde la firmeza en la protección de la salud de los vecinos y, al mismo tiempo, desde la búsqueda permanente de soluciones que evitaran un bloqueo de determinados sectores o un parón en la actividad económica. Hablando a los madrileños como ciudadanos adultos. Ofreciéndoles alternativas en el fomento de una movilidad cada vez más sostenible, sin que renunciaran por ello a su libertad para moverse por nuestras calles. Supimos que ese era el camino correcto y 1.500 días después aquí estamos, impulsados por todos aquellos que refrendaron abrumadoramente nuestra hoja de ruta en las urnas. Ese otro aire que hoy respiramos en Madrid es posible gracias a cada uno de ellos.

El balance del año que acaba de terminar en materia de calidad del aire sitúa a nuestra ciudad a la vanguardia de Europa. Grandes urbes del continente como París, Berlín, Roma o Barcelona no cumplieron en 2022 con la directiva. La capital de España no sólo lo ha conseguido por segundo año consecutivo, además, la Comisión Europea nos acaba de señalar como ciudad misión de la UE, lo que supone un aval a las iniciativas impulsadas desde el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Consistorio para alcanzar la neutralidad climática de aquí a 2030 y también sitúa a la capital de España como ejemplo de ciudad inteligente.

Cada una de las iniciativas que conforman la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 ha contribuido a fortalecer una inercia imparable, alejada ya de cualquier elemento o explicación coyuntural, en la mejora de la calidad del aire. Empezando por la reducción del dióxido nitrógeno a través de la implantación de las tres zonas de bajas emisiones que han limitado progresivamente la circulación de los vehículos más contaminantes. O mediante la renovación del parque automovilístico de la ciudad con el hito excepcional que ha supuesto el plan de ayudas Cambia 360, con un presupuesto de 55 millones de euros desde 2020 para vehículos de autotaxi, particulares, transporte de mercancías, micromovilidad e infraestructuras de recarga. Y dando otro paso al frente en el seno de la Unión Europea al convertirnos en la primera ciudad española –y una de las primeras capitales comunitarias– con una flota de autobuses 100% limpia, de acuerdo con lo establecido en la Directiva de Vehículos Limpios.

Esas medidas han impulsado una transformación radical en la movilidad de la ciudad que nos ha permitido encadenar récord tras récord. Como los registrados en estos últimos meses por los autobuses de la Empresa Municipal de Transporte o el nuevo sistema de bicimad tras su reciente ampliación y aterrizaje en los 21 distritos de la ciudad. Las cifras hablan por sí solas: el pasado mes de octubre, la movilidad sostenible –que agrupa al transporte público y los desplazamientos andando, en bicicleta o cualquier otro vehículo de movilidad urbana– alcanzó por primera vez en la historia el 55% del total de viajes realizados en la ciudad, frente al 45% de los efectuados en vehículos privados.

También tuvimos claro que era necesario intervenir sobre otro de los focos claros de emisión con la prohibición de las calderas de carbón para reducir los óxidos de nitrógeno. Más de 33 millones de euros hemos destinado en estos años para que las comunidades de vecinos pudieran instalar en sus edificios sistemas de climatización más eficientes.

Hemos actuado desde la regulación normativa, con la aprobación de las ordenanzas de Movilidad Sostenible y de Calidad del Aire y Sostenibilidad. Pero también sobre el terreno. Con peatonalizaciones como la ejecutada en la Puerta del Sol. O con obras en puntos clave de la ciudad como la que ha supuesto la transformación del Nudo Norte. Y no nos vamos a detener pese al éxito renovado en 2023. En el horizonte más cercano, los primeros pasos del futuro Paseo Verde del Suroeste que nacerá a partir del ansiado soterramiento de la A-5. O la puesta en funcionamiento de la Hidrogenera de Villaverde con cerca de 3.000 paneles fotovoltaicos.

Un ya lejano 30 de septiembre de 2019 presentamos en sociedad las 200 iniciativas que integraban la estrategia Madrid 360. Lo hicimos en el Faro de Moncloa. Fue nuestro particular kilómetro cero en el camino para cambiar Madrid. Un trayecto apasionante que desde diciembre de 2021 tiene otro gran símbolo: la Plaza Elíptica. Este enclave que conecta Carabanchel y Usera era hasta ese momento uno de los puntos negros de los atascos y la polución en Madrid. No nos resignamos. Otros demostraron que su única solución para los vecinos de la zona fue cambiar el nombre a la plaza. Nosotros teníamos otra prioridad para este entorno y activamos la zona de bajas emisiones que ha sido clave en la drástica reducción de sus niveles de contaminación que ahora Europa certifica. Teníamos claro que también el sur de Madrid, como el conjunto de esta ciudad vibrante que cada día ponen en pie sus 3,3 millones de habitantes y aquellos que vienen a trabajar y a visitarnos, merecía respirar otro aire.

José Luis Martínez-Almeida.Alcalde de Madrid.