Sin Perdón

La recta final de unas elecciones decisivas

«El fracaso del proyecto de Sánchez pasa, también, porque Feijóo lidere el voto constitucionalista»

La legislación electoral prohíbe que sigamos publicando encuestas. Es una regulación absurda, porque lo razonable es que siguiéramos haciéndolo hasta el último día. Una medida acertada de regeneración, no la farsa electoral que ha organizado Sánchez, sería acabar con esta esperpéntica limitación de la libertad de información. Por supuesto, se siguen haciendo y se conocen en las redacciones y las sedes de los partidos. Cataluña afronta unas elecciones decisivas en todos los terrenos, porque tienen una gran relevancia en clave interna, pero se han españolizado, por utilizar la absurda terminología de los independentistas, hasta un extremo que no recuerdo y eso que las he seguido todas. En esta ocasión determinará la duración de la legislatura en Madrid, ya que una victoria de Puigdemont será muy lesiva para Sánchez, pero, paradójicamente, también que el expresidente catalán no consiga su objetivo de regresar al palacio de la Generalitat. Todo indica que el líder del PSOE baraja una disolución de las Cortes para aprovecharse del resultado de las catalanas y lograr un apoyo en las urnas que le permita emprender su operación de acabar con la independencia judicial y de la prensa crítica con el sanchismo.

Al PP le iría muy bien, aunque parece imposible, romper su techo electoral y atraer el voto que obtuvo Ciudadanos. El fracaso del proyecto de Sánchez pasa, también, porque Feijóo lidere el voto constitucionalista. A estas alturas sabemos que el proyecto personalista del líder socialista tiene un horizonte muy claro que está basado en un radicalismo populista de corte iberoamericano al estilo del peronismo o el kirchnerismo. Es bueno recordar que el resultado que obtuvo en las pasadas generales en Cataluña fue determinante para que pudiera formar un gobierno de coalición con el apoyo de los independentistas y los antiguos dirigentes del aparato político y militar de ETA. Los votantes constitucionalistas deberían reflexionar si prefieren que esto siga igual o que se convoquen unas elecciones donde se ponga punto final a un gobierno que ha entrado en una inquietante espiral de radicalismo. Sánchez otorgó los indultos y acabó con el delito de sedición, ahora ha impulsado una amnistía inconstitucional y acabará cediendo un concierto y un referéndum de autodeterminación. La mayoría de catalanes que defienden la Constitución han de pensar si quieren esto o un gobierno presidido por Feijóo.

Francisco Marhuendaes catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE)