Europa

Málaga

¿Qué hacemos ahora con nuestros hijos?

Ana Wagener y Roberto Enríquez protagonizan «Málaga»

Roberto Enríquez y Críspulo Cabezas, en la función
Roberto Enríquez y Críspulo Cabezas, en la funciónlarazon

¿Qué puede ocurrir con los hijos de una pareja de padres divorciados cuando ambos quieren vivir una nueva vida tras la ruptura y estos quedan, a veces, en terreno de nadie?

¿Qué puede ocurrir con los hijos de una pareja de padres divorciados cuando ambos quieren vivir una nueva vida tras la ruptura y estos quedan, a veces, en terreno de nadie? ¿Cómo se puede repartir la responsabilidad de lo que ocurra cuando, por distintas causas, ninguno de los dos padres ha podido atender a los hijos? Vera y Michael acaban de divorciarse. Se enfrentan al dilema de con quién dejar a su hija un fin de semana que ambos tienen ocupado. La madre ha planeado un viaje a Málaga con su nueva pareja. El padre, a quien le toca la niña ese fin de semana, tiene un congreso importante al que no puede faltar. Tampoco pueden contar con su niñera habitual y la única solución que encuentran es dejar a Rebekka –la niña– a cargo de Álex, un vecino adolescente fascinado por el cine. En esos días ocurrirán una serie de circunstancias que van a cambiar sus vidas.

«Málaga» es una obra de Lukas Bärfuss, un relevante autor suizo –residente en Zúrich– inédito aún en España. Dirigida por Aitana Galán, cuenta con Roberto Enríquez, Ana Wagener y Críspulo Cabezas en el reparto. «Bärfuss es un autor joven –41 años– y brillante del que, incomprensiblemente –dice la directora–, no se ha estrenado nada aquí, siendo un autor muy representado en toda Europa». Según ella, «porque aquí traducimos poco y eso provoca desconocimiento».

Inquietud e intriga

Su dramaturgia lleva las vanguardias incorporadas, pero hace un teatro de personajes, rompedor por los contenidos que presenta. Su punto de vista –continúa Aitana Galán– no es políticamente correcto, más bien es ácido e irónico. Habla de un ser humano que revela cosas muy de hoy. Sus planteamientos tienen que ver con la ética y con el sentido de la vida. No juzga, solo expone los problemas y las distintas formas de reaccionar ante ellos y deja que sea el espectador quien saque sus propias conclusiones. No es moralista. Se enfrenta a una problemática latente en todas las relaciones afectivas entre seres humanos. En este caso, la libertad personal –o el egoísmo– frente a la responsabilidad. «Es difícil conciliar el ser padre con el trabajo o con el ocio. Queremos seguir viviendo nuestra vida y eso no es fácil cuando se tienen hijos. A veces sacamos nuestra parte más egoísta. Creo –continúa Galán– que tener hijos es un acto de generosidad y esto conlleva responsabilidad». Lo que plantea Bärfuss son circunstancias de la vida cotidiana «en las que también interviene el azar, y lo que aquí comienza como una comedia divertida, acaba en verdadera tragedia. Sus vidas no volverán a ser las mismas después de ese fin de semana». La directora manifiesta que quedó conmovida cuando leyó «Málaga» y se entusiasmó con el autor. «Me gusta su teatro directo, muy despojado, sin truco y su capacidad de síntesis.

La obra está contada como un «thriller»« y genera inquietud e intriga. En eso tiene un punto cinematográfico». Y concluye Galán «agradeciendo» el reparto de lujo con el que cuenta. «Son actores de primer nivel y tenerlos en esta obra es para mí todo un sueño hecho realidad».

DÓNDE: Teatro del Arte. Madrid.

CUÁNDO: del 2 de febrero al 3 de marzo.

CUÁNtO: desde 14 euros.