Santoral

¿De dónde viene la expresión "tener más paciencia que el Santo Job"?

Este 10 de mayo celebramos el santoral del Santo Job Patriarca, un personaje bíblico que se ha convertido en la personificación de la paciencia

¿De dónde viene la expresión "tener más paciencia que el Santo Job"?
¿De dónde viene la expresión "Más paciencia que el Santo Job"?Dominio público

El santoral cristiano es el listado de santos y beatos que son honrados por los fieles en una fecha concreta. Estas efemérides se mantienen y se celebran, para que los católicos de todo el mundo mantengan el recuerdo de su sacrificio y para que su vida de rectitud sirva como referencia y guía moral para todos ellos. Pero, dada la extensísima historia de la Iglesia Católica, es normal que haya más de una onomástica el mismo día.

En el caso concreto de este miércoles, día 10 de mayo, celebramos las onomásticas de San Antonino de Florencia, de Santa Blanda mártir, el de San Calepodio presbítero, el de San Cataldo de Irlanda, San Comgall, San Dioscórides de Mira, San Epímaco mártir, San Gordiano de Roma, San Guillermo de Pontoise, San Juan de Ávila, Santa Solangia, Beata Beatriz I de Este, Beato Enrique Rebuschini, Beato Iván Merz o el del Beato Nicolás Albergati.

Una monja pasea por la plaza de San Pedro en el Vaticano
Una monja pasea por la plaza de San Pedro en el VaticanoANGELO CARCONIAgencia EFE

Es decir, que hay muchos santos y beatos que ocupan el santoral de este 10 de mayo. Sin embargo, hay dos principales: San Damián de Molokai, llamado Padre Damián, padre de los leprosos o el leproso voluntario, y el Santo Job Patriarca, que es el personaje en el que hoy centraremos nuestra atención:

Más paciencia que el Santo Job

El Santo Job es un personaje bíblico archiconocido por su enorme paciencia. Es considerado uno de los patriarcas de Israel en los tiempos anteriores a Jesucristo. Nació en la región de Hus, al sudeste de Palestina. Era un hombre pudiente y muy respetado por sus vecinos. En su haber contaba con una cantidad inmensa de piezas de ganado. Además, Dios le había bendecido con diez hijos, siete varones y tres mujeres.

En una ocasión, Dios celebró frente a sus ángeles la bondad y la fe de Job, quien a menudo hacía sacrificios para pedir perdón por los probables pecados de sus muchos hijos: “¡Quien sabe si alguno de mis hijos haya disgustado al Señor con algún pecado!”. Al oír esto, Satanás trató de desmerecer la fe de Job y la achacó a la vida próspera que Dios le había proporcionado. Por eso, Satanás le propuso a Dios que pusiera a prueba la fe de Job quitándole todo lo que tenía. Dios accedió.

Días después, un mensajero llegó a Job para decirle que unos ladrones habían matado a sus trabajadores y robado sus bueyes. Luego llegó otro para informarle de que un rayo había matado a todas sus ovejas y a varios pastores. Un tercer mensajero le dijo que los enemigos del país vecino habían matado a los arrieros y que habían robado los camellos. Y finalmente, un cuarto mensajero le dijo que sus siete hijos y sus tres hijas también habían muerto cuando el techo de la casa donde estaban almorzando se derrumbó.

Sin embargo, y a pesar de todas estas desgracias, Job no culpó a Dios en ningún momento. En lugar de eso, se rapó la cabeza en señal de duelo y dijo: "Desnudo salí del vientre de mi madre. Sin nada volveré al sepulcro. Dios me lo dio, Dios me lo quitó. Bendito sea Dios". Dios valoró el buen talante de Job, y cuando volvió a reunirse con sus ángeles en el cielo, les dijo: “¿Se han fijado en mi amigo Job? No hay ninguno tan santo como él en la Tierra".

¿De dónde viene la expresión "Más paciencia que el Santo Job"?
¿De dónde viene la expresión "Más paciencia que el Santo Job"?Dominio Publico

No obstante, Satanás seguía sin estar impresionado. De hecho, volvió a achacar la fe de Job a sus privilegios. Concretamente, a su buena salud. Así que desafió a Dios y este aceptó. Poco tiempo después, Job desarrolló una terrible enfermedad cutánea. Pero Job no culpó a Dios: “Si aceptamos de Dios los bienes, ¿por qué no vamos a aceptar los males que Él permita que nos sucedan?”.

Al saber de sus horribles infortunios, tres amigos viajaron para encontrarse con Job. Y estando ya con él, formularon diferentes teorías que podrían explicar por qué se habían acumulado de golpe tantas desgracias en la vida del paciente Job. La conclusión final y en la que los tres amigos estuvieron de acuerdo es que probablemente había sido muy pecador… y que por eso Dios le estaba castigando.

Job negó aquella explicación. Había hecho todo lo posible por complacer a Dios y por comportarse con rectitud durante toda su vida. Sin embargo, en un momento de emoción, Job llegó a cuestionar a Dios, diciéndole que él no merecía un sufrimiento tan grande. En ese momento Dios interviene y le contesta “¿Quién es este que se atreve a discutirme?”.

Job se da cuenta de su error y retira sus palabras diciendo: “Señor: me he puesto a hablar lo que no debía decir. Retracto mis palabras. Me arrepiento de lo que he dicho al protestar. Te pido perdón humildemente, mi Señor”. Aceptó sus disculpas y después se dirigió a sus tres amigos, a quienes les dijo: “Ofrézcanme un sacrificio para pedirme perdón por lo que dijeron contra mi amigo Job. Y por las oraciones de él, yo los perdono”.

Escena del libro de Job en el que tres de sus amigos culpan a Job por sus desgracias
Escena del libro de Job en el que tres de sus amigos culpan a Job por sus desgraciasDominio Público

Después de aquel episodio, Dios bendijo de nuevo a Job, concediéndole el doble de ganado y el doble de riquezas, devolviéndole su salud y curándole de su enfermedad. Además, le concedió una larga vida (llegó a vivir 140 años), teniendo la oportunidad de volver a construir una nueva familia con una nueva esposa y con otrs muchos hijos y nietos. Según narra la Biblia, el Santo Job murió feliz en la senectud, satisfecho con la vida que había llevado.