El 75% de los españoles tiene deficiencia de Vitamina D, según un estudio de la Revista Nature

Aunque España ostenta el título de ser el país europeo con mayor cantidad de horas de sol, sorprendentemente, un estudio publicado en la ''Revista Nature'' revela que el 75% de la población española sufre de deficiencia de vitamina D. La doctora Karina Casanova, especialista en medicina interna, señala que este fenómeno puede atribuirse en gran medida a los nuevos hábitos de vida: el sedentarismo, el aumento del tiempo pasado en interiores y frente a dispositivos electrónicos como ordenadores y tablets.

En los jóvenes es todavía más evidente. El 80% de los examinados presentan deficiencia de vitamina D.

La exposición al sol es crucial para activar la producción de vitamina D en el organismo, aunque es fundamental equilibrarla con la protección contra los rayos solares. Se recomienda exponerse al sol durante unos 10 o 15 minutos al día, sin aplicar protector solar, preferiblemente en las manos y piernas, en las primeras o últimas horas del día cuando la intensidad de la luz solar es más suave.

En contraste con España, los países nórdicos muestran niveles de vitamina D superiores debido a que, al tener una menor exposición solar, sus habitantes recurren a suplementos diarios para mantener sus niveles adecuados.

La alimentación desempeña un papel crucial en este aspecto, ya que alimentos como pescados grasos, la yema de huevo y los productos lácteos enriquecidos con vitamina D, indicados en sus envases, son fuentes importantes de esta vitamina. Además de fortalecer los huesos y los músculos, la vitamina D también ejerce influencia sobre el sistema nervioso. Se ha demostrado que la falta de exposición a la luz solar es un factor de riesgo para la depresión, y esta relación se atribuye en parte a la deficiencia de vitamina D debido a la escasa exposición al sol. Es por ello que en los países nórdicos, donde la exposición solar es limitada, las tasas de depresión suelen ser más elevadas que en regiones más soleadas.

Es importante encontrar un equilibrio: aunque es esencial protegerse del sol con un protector solar de al menos Factor 30, se recomienda exponerse al sol durante al menos 10 minutos al día sin protección. Este tiempo de exposición ayuda a estimular la producción de vitamina D, pero se debe evitar la exposición prolongada que pueda provocar quemaduras solares o aumentar el riesgo de cáncer de piel. En resumen, se trata de buscar un equilibrio óptimo en la exposición al sol.