Dieta Blanda
¿Qué debemos comer al hacer dieta blanda? Boticaria García responde
Alimentación variada y cuidadosa para proteger el sistema digestivo sin sacrificar ni el sabor, ni los nutrientes
La conocida divulgadora de salud @boticariagarcia ha compartido en su cuenta de Instagram un reel en el que desmonta algunos mitos sobre la dieta blanda y ofrece consejos sobre cómo llevarla correctamente. Tradicionalmente, esta dieta es recomendada para quienes padecen problemas gastrointestinales, como diarrea o molestias estomacales. En su publicación, Boticaria aclara que no se trata de limitarse a alimentos insípidos y monótonos, sino de hacer elecciones cuidadosas dentro de cada grupo alimenticio.
Desmitificando el jamón de York
Boticaria García nos invita a repensar ciertos alimentos que, culturalmente, hemos asociado con la dieta blanda. “Aunque hay algo que llevamos comiendo toda la vida cuando andamos sueltos de la tripa, lo mejor es olvidarse del jamón de york, que además no existe”, comenta. En este sentido, nos recuerda que el jamón de York, tal como lo conocemos, es un ultraprocesado que conviene evitar cuando buscamos opciones digestivas.
La dieta blanda: más que pescado hervido
Uno de los puntos clave que destaca Boticaria es que la dieta blanda no significa que debamos torturarnos con una alimentación basada sólo en pescado hervido. “Puedes comer casi de todo, pero con lecciones muy concretas en cada grupo de alimentos”. Esta afirmación desmonta el mito de que una dieta blanda es sinónimo de monotonía y, en su lugar, promueve la diversidad alimenticia bajo ciertas pautas.
Cereales: sin fibra mejor
En cuanto a los cereales, Boticaria recomienda evitar los integrales durante una fase de dieta blanda. Explica que, aunque generalmente la fibra es beneficiosa, en situaciones de diarrea es mejor optar por cereales sin ella: “Cuando tenemos diarrea, el intestino no está para tanta fiesta, bueno, para tanta fibra”. Así, sugiere consumir arroz blanco, pasta o patatas hervidas, que resultan una opción más suave para el sistema digestivo.
Verduras y frutas: cocidas, no crudas
Una de las reglas de oro en la dieta blanda es evitar las frutas y verduras crudas, pues su alto contenido en fibra puede irritar el intestino. Boticaria sugiere consumirlas cocidas y, en lugar de una manzana cruda, recomienda optar por una versión asada. Además, advierte sobre evitar crucíferas, como el brócoli, que pueden resultar flatulentas.
Lácteos: sin azúcar y bajos en grasa
Los lácteos tienen un lugar en la dieta blanda, siempre y cuando sean naturales y bajos en grasas. El yogur natural y los quesos frescos se consideran buenos aliados para el sistema digestivo. Boticaria enfatiza en elegir productos sin azúcares añadidos, que sean suaves para el estómago y no estimulen en exceso el sistema gastrointestinal.
Carnes blancas y huevos
En cuanto a las proteínas animales, Boticaria sugiere las carnes blancas como el pollo, el pavo o el pescado blanco, cocinados al vapor, hervidos o asados, evitando siempre las frituras. En el caso de los huevos, explica que también son una opción adecuada, en especial la clara, “que es la parte más proteica".
Boticaria García tampoco aconseja este alimento frito, una mejor opción sería un huevo duro o pasado por agua. Estas recomendaciones ayudan a minimizar la irritación intestinal, al mismo tiempo que aseguran una buena ingesta de proteínas.
“Si notas que tu intestino vibra...”
Boticaria nos recuerda con humor la importancia de escuchar a nuestro cuerpo: “Si notas que tu intestino vibra, ten cuidado con la fibra". Su consejo final refuerza la idea de que una dieta blanda no tiene por qué ser un sacrificio, sino que debe adaptarse a nuestras necesidades digestivas, ayudándonos a mejorar nuestra salud sin perder el placer de la alimentación.