El ictus, también conocido como accidente cerebrovascular (ACV), es una emergencia médica que requiere atención inmediata. Reconocer los síntomas y actuar rápidamente puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte, así como entre la recuperación completa y la discapacidad permanente. Esta es una guía sobre cómo identificar y actuar ante un ictus:

Reconocer los síntomas

• Pérdida de fuerza o sensibilidad repentina en el rostro, brazo o pierna, especialmente en un lado del cuerpo.
• Confusión repentina, dificultad para hablar o entender el lenguaje.
• Problemas repentinos para ver con uno o ambos ojos.
• Dificultad para caminar, mareos repentinos, pérdida de equilibrio o coordinación.
• Dolor de cabeza severo y repentino sin causa conocida.

Actuar rápidamente

• Llama inmediatamente a los servicios de emergencia tan pronto como observes algún síntoma de ictus en ti mismo o en alguien más.
• No ignores los síntomas ni esperes a ver si mejoran por sí solos. El tiempo es crucial en el tratamiento del ictus.
• Mientras esperas la ayuda médica, permanece tranquilo y cómodo, y trata de mantener a la persona afectada calmada y tranquila.
• No ofrezcas alimentos ni bebidas a la persona afectada, ya que podrían tener dificultades para tragar.

No intentes manejar la situación por ti mismo

• Evita transportar a la persona afectada en un vehículo privado a menos que sea absolutamente necesario. Es importante esperar a los servicios de emergencia para garantizar que la persona reciba el tratamiento adecuado lo más rápido posible.
• No administres medicamentos ni intentes realizar maniobras médicas sin la supervisión de un profesional de la salud.
• El ictus es una emergencia médica seria y potencialmente mortal, pero el reconocimiento temprano de los síntomas y la acción rápida pueden mejorar significativamente las probabilidades de recuperación.