Alimentación

Un médico de Harvard descubre que esta dieta reduce el riesgo de muerte hasta en un 30%

El estudio que examinó datos de más de 200.000 personas confirma que la dieta de salud planetaria disminuye la probabilidad de cáncer, cardiopatías y enfermedad respiratoria

Dieta verduras
La Dieta Planetaria se asocia a un menor riesgo de cáncer, cardiopatías y enfermedad respiratoriaFreepik

La Dieta de la Salud Planetaria sigue acumulando evidencias de sus beneficios en los estudios más recientes. Se ha relacionado en varias ocasiones con una mayor salud para el conjunto de la población, ya que se basa en lograr un sistema alimentario mundial sostenible. No, no es una dieta de adelgazamiento ni una solución milagro. Efectivamente, la dieta planetaria va de cuidar... el planeta.

Posiblemente no hayas oído hablar de ella, pero su nacimiento es puramente científico. La dieta de salud planetaria es una dieta flexitariana (omnívora) creada tras dos años de trabajo liderados por la Comisión Internacional EAT-Lancet, formada por 37 científicos líderes de 16 países. Esta pauta alimenticia surge como resultado de un informe publicado en la revista de investigación The Lancet, el 16 de enero de 2019. En él anuncian que esta dieta tiene por objetivo poder alimentar a una población mundial prevista de 10 mil millones de personas para el año 2050 de forma sostenible y «sin destruir el planeta».

Ahora, un estudio recién publicado hoy en The American Journal of Clinical Nutrition no solo corrobora el potencial de la dieta planetaria para reducir las emisiones globales, sino de sus beneficios para la salud de las personas que se alimentan con ella. En concreto, se ha llegado a apreciar hasta un 30% menos de riesgo de muerte prematura por múltiples causas en aquellas que siguen al pie de la letra esta dieta.

En su estudio, los investigadores afirman que la dieta de la salud planetaria redujo la probabilidad de padecer todas las principales causas de muerte, incluidas las cardiopatías, el cáncer y las enfermedades pulmonares de los participantes en la investigación.

Añaden que la dieta basada en plantas también puede ayudar al medio ambiente. «Cambiar nuestra forma de comer puede ayudar a ralentizar el proceso de cambio climático. Y lo que es más sano para el planeta es también más sano para los humanos», afirma en un comunicado de prensa el doctor Walter Willett, coautor de la investigación y presidente del Departamento de Nutrición de la Escuela de Salud Pública 'T.H. Chan' de Harvard.

«Los resultados demuestran hasta qué punto están relacionadas la salud humana y la del planeta. Comer sano favorece la sostenibilidad medioambiental, que a su vez es esencial para la salud y el bienestar de todos los habitantes de la Tierra», añade.

¿Qué es la Dieta de la Salud Planetaria?

La dieta de la salud planetaria hace hincapié en los alimentos de origen vegetal, así como en los alimentos sostenibles para el medio ambiente. Un plato de comida que siga la dieta estará compuesto a la mitad por frutas y verduras. La otra mitad del plato incluye cereales integrales, aceites vegetales insaturados, fuentes de proteínas vegetales y, opcionalmente, modestas cantidades de proteínas de origen animal.

Estos alimentos aportan abundantes nutrientes esenciales como vitaminas, minerales, antioxidantes, fibra, proteínas y ácidos grasos omega-3 que nuestro organismo necesita para mantenerse sano y prevenir enfermedades crónicas. La dieta también limita el consumo de carne roja y procesada debido al mayor impacto medioambiental de estos alimentos y a su asociación con afecciones como el cáncer colorrectal y las cardiopatías.

Al respaldar esta dieta, podemos promover tanto la salud humana como la planetaria. Para llevar a cabo su estudio, los investigadores examinaron los datos de más de 200.000 personas que participaron en estudios previos. Los sujetos no padecían enfermedades crónicas importantes al inicio del periodo de estudio. Rellenaron cuestionarios sobre su dieta cada cuatro años durante un máximo de 34.

A continuación, se les dio una puntuación basada en su ingesta de grupos de alimentos como verduras, cereales integrales, carne de ave y frutos secos. Las personas del 10% que más seguían la Dieta Planetaria tenían un 30% menos de riesgo de muerte prematura que las del 10% que menos seguían la dieta.

Además de los beneficios para la salud, también se descubrió que un alto grado de adherencia a la Dieta de Salud Planetaria reduce las emisiones de gases de efecto invernadero en un 29%, así como el uso de tierras de cultivo en un 51% y las necesidades de fertilizantes en un 21%.

Cuidar del planeta y que se parezca a la dieta mediterránea, una motivación más

La Dieta de la Salud Planetaria comparte similitudes con dietas tan saludables como la mediterránea, la pescatariana, la vegetariana y la DASH (enfoques dietéticos para detener la hipertensión). El doctor Christopher Gardner, presidente del Comité de Nutrición de la Asociación Americana del Corazón y profesor de medicina en la Universidad de Stanford (California), sostiene que eso puede suponer un factor de motivación adicional para algunas personas.

También le parece una ventaja el hecho de saber que se está impactando también sobre la salud del planeta. «Me parece un reto motivar a la gente a hacer cambios sustanciales en su dieta por el bien de su propia salud. Muchas personas están dispuestas a posponer una dieta saludable cuando piensan que el único que están impactando son ellos mismos», afirma.

Pero la Dieta de Salud Planetaria «proporciona un tipo diferente de motivación», destaca, y continúa: «Ayuda a dejar claro que nuestras elecciones dietéticas personales tienen un impacto en nuestros vecinos, nuestra comunidad, nuestro país y en el mundo, cuando todas esas decisiones de elección de alimentos se consideran colectivamente. En nuestra investigación hemos descubierto que éste es un importante motivador potencial para un cambio dietético significativo», concluye.