Salud

Similar a la gastritis: los síntomas que avisan de un cáncer de esófago como el de Jose Mujica

Este tipo de cáncer es menos común que otros, pero es altamente letal y los primeros síntomas suelen ser sutiles, además de confundirse con otras patologías menos graves

El expresidente de Uruguay José Mujica
El expresidente de Uruguay José Mujica ha fallecido por cáncer de esófagolarazonEL UNIVERSAL / ZUMA PRESS / CONT

El cáncer de esófago es una enfermedad silenciosa que estos días ha vuelto a ponerse en el foco a raíz del fallecimiento de José "Pepe" Mujica. El expresidente de Uruguay ha muerto a los 89 años, debido a esta patología oncológica que, aunque menos común que otros tipos de cáncer, es altamente letal.

Mujica, conocido por su vida austera y compromiso social, anunció en abril de 2024 que padecía esta enfermedad. A pesar de someterse a radioterapia, en enero de 2025 informó que el cáncer se había extendido al hígado y decidió no continuar con el tratamiento. Falleció el 13 de mayo de 2025 en su hogar en Montevideo, rodeado de su esposa, Lucía Topolansky, y seres queridos.

¿Qué es el cáncer de esófago?

El cáncer de esófago afecta al tubo que conecta la garganta con el estómago. Existen dos tipos principales: el carcinoma escamoso, relacionado con el consumo de tabaco y alcohol, y el adenocarcinoma, vinculado al reflujo ácido crónico y la obesidad. Aunque no es de los más frecuentes, su tasa de mortalidad es alta debido a su detección tardía.

En concreto, el cáncer de esófago es el sexto tumor más frecuente del aparato digestivo en España (por detrás del cáncer colorrectal, páncreas, estómago, hígado y vesícula biliar). Se sitúa en octavo lugar entre los cánceres más frecuentemente diagnosticados en el mundo. En nuestro país, afecta aproximadamente a 1 de cada 100.000 mujeres y 8 de cada 100.000 hombres.

Como vemos, el cáncer de esófago es más frecuente en el hombre que en la mujer. En ambos casos, la edad habitual de presentación es entre los 55 y los 70 años, siendo infrecuentes los casos en personas por debajo de los 40 años.

Síntomas y factores de riesgo

El principal problema para la detección precoz del cáncer de esófago es que, habitualmente, es asintomático en sus inicios. Por eso, su diagnóstico suele ser casual durante el estudio de otros problemas de salud. Además, los signos pueden confundirse con patologías más leves como la gastritis.

Los síntomas iniciales del cáncer de esófago suelen ser sutiles, como la disfagia (dificultad para tragar alimentos sólidos), pérdida de peso inexplicada y dolor en el tórax (detrás del esternón) o acidez gastroesofágica persistente.

Otros síntomas menos conocidos son los respiratorios, como tos e infecciones, que suelen aparecer en un estadio más avanzado, así como sangrados, disfonía, ronquera o hipo. Factores de riesgo incluyen el consumo de bebidas muy calientes, tabaquismo, consumo excesivo de alcohol, obesidad y reflujo gastroesofágico crónico.

Prevención y detección temprana

La prevención se basa en modificar hábitos de vida: evitar el tabaco y el alcohol, mantener un peso saludable y tratar el reflujo ácido de manera adecuada. Ante síntomas persistentes, es crucial consultar a un médico y considerar una endoscopia para una detección temprana.

El tratamiento depende de la etapa del cáncer e incluye cirugía, quimioterapia, radioterapia e inmunoterapia. La detección temprana mejora significativamente el pronóstico, con tasas de supervivencia a cinco años de hasta el 80% en etapas iniciales, pero estas cifras disminuyen drásticamente en etapas avanzadas.