Caza

Las siete medidas que aseguran los conejos en el coto

Estas son las medidas que harán que vuelvas a disfrutar de la caza del conejo.

Conejo de monte
Conejo de monteSergio GómezLa Razón

El conejo pese a ser una especie muy prolífica tiene una cantidad enorme de enemigos y si no trabajamos en el coto para favorecer su desarrollo sus poblaciones irán a menos como está pasando en muchas zonas. Presentamos siete medidas fundamentales para ayudar al conejo.

1. Controlar las alimañas

De nada servirán las medidas que tomemos si en primer lugar no se mantiene a raya a los enemigos del conejo. Controlar las poblaciones de zorro se antoja fundamental para el buen desarrollo y cría del conejo. El raposo es uno de sus peores enemigos. Del mismo modo el jabalí debe ser controlado con esperas y batidas y más aún hoy día que sus poblaciones están creciendo descontroladamente.

2. Sembrar cultivos beneficiosos

Las gramíneas y leguminosas benefician al conejo al estar presentes y accesibles para el conejo durante la mayor parte del año. Además, debe buscarse que las zonas de implantación de dichos cultivos estén rodeadas o linden con zonas de vegetación silvestre y matorrales donde el conejo pueda encontrar refugio y seguridad en sus salidas.

3. Crear y mantener vivares

Los vivares son más que necesarios para disfrutar de una buena población de conejos. Aquellos ya existentes deben ser cuidados y entramados de nuevo ya que con el tiempo pueden sufrir deterioros que afectan a la seguridad del conejo en su madriguera. Por otra parte, también es aconsejable crear nuevos vivares. Su construcción es sencilla y muy barata y ofreciendo más refugio aseguramos la supervivencia de muchos más animales.

4. Disponer comederos y bebederos

Disponer comederos y bebederos es básico para la cría. En primavera, cuando se da la época lactante sería muy beneficioso aportar en la zona de las madrigueras el heno o la alfalfa que tanto gustan los orejudos.

5. Limitar las repoblaciones

Las repoblaciones deben ser la última opción a tomar. Solo cuando todas las medidas tomadas no hayan surtido el efecto deseado y las poblaciones de conejo del coto peligren entonces es aconsejable repoblar, no antes. Es preferible salvar las poblaciones de conejos local ya que introducir otros conejos conlleva introducir animales con una genética diferente y esto puede favorecer la introducción de nuevas cepas de virus y acabar por arruinar así el plan. Del mismo modo no se aconseja la vacunación en los animales autóctonos como medida preventiva, su eficacia no está ampliamente probada y son más los perjuicios que se pueden ocasionar al conejo como es el estrés ocasionado al capturarlo para su manejo o la posible merma en sus condiciones físicas al ocasionarle la vacuna posibles efectos secundarios. Además, genera un trabajo y un gasto extra el hecho de capturar a los conejos para su vacunación.

6. Desinfectar

Los parásitos son otro de los grandes enemigos de los conejos, tanto o más que los propios depredadores. En las madrigueras de los conejos es donde las pulgas crean mayores problemas. Es aconsejable, por tanto, llevar a cabo desinfecciones periódicas de las madrigueras y sus aledaños con productos insecticidas sobre todo durante la primavera y el verano que son las épocas de mayor afectación de estos parásitos.

7. Cazar en mano

La caza del conejo cuenta con varias modalidades muy arraigadas en la cultura cinegética española. Pero de todas ellas, la caza en mano y con escopeta se torna la más favorable para las poblaciones conejeras de un coto ya que en este tipo de caza los conejos machos son los más cazados al estar más tiempo en el exterior de las madrigueras que las hembras. Al eliminar machos aseguramos dejar suficiente “madre” para seguir criando.