4-M

El Gobierno tolera una marcha sin límites del 1 de mayo para agitar la campaña en Madrid

El Gobierno no ha marcado restricciones para la manifestación de Madrid, en la que se esperan 30.000 personas, y pretendía prohibir los toros, donde caben 6.000

Imagen de una manifestación del 1 de mayo
Imagen de una manifestación del 1 de mayoJESUS G. FERIA.JESUS G. FERIA.

El 1 de mayo los sindicatos han llamado a tomar las calles «después de la excepcional situación vivida en 2020». Y, en Madrid, donde se espera la manifestación más numerosa, lo harán como si no hubiera pandemia. Sin ningún tipo de limitación.

Hasta el momento, la Delegación de Gobierno no ha trasladado ningún tipo de recomendación a las organizaciones convocantes. A la Consejería de Salud le solicitó informes de al menos 10 convocatorias y hasta el momento la Delegación ha avalado ocho de ellas. Aunque los técnicos de la Comunidad no vean demasiado riesgo en el 1.M, lo quesorprende es el cambio de parecer del Ministerio de Sanidad.

Hace poco más de una semana, el departamento que dirige Carolina Darias intentó que la Comisión de Salud Pública avalara la prohibición de eventos masivos en territorios con máximo nivel de alerta.

La propuesta de Sanidad para regular aforos en función de la situación epidemiológica no era casual. Tenía una clara intencionalidad política. Fue dado a conocer en plena campaña madrileña y justo cuando la presidenta Isabel Díaz Ayuso presentó el festival taurino de las Ventas para el 2 de mayo.

Con la propuesta de Darias, este acto no podría celebrarse al estar la capital en una incidencia de máximo riesgo. Finalmente, la Comisión de Salud votó en contra. Ayuso ganó y podrá haber toros en Las Ventas, con un aforo del 25% de la plaza.

Sin embargo, para el 1 de mayo, no habrá ningún tipo de limitación de asistencia, pese a que la incidencia acumulada a 14 días en Madrid se sitúa en 388 casos por cada 100.000 habitantes, de forma que supera ampliamente el umbral de «riesgo extremo» que Sanidad marca en los 250 casos.

Fuentes del Gobierno regional han asegurado que desde el Gobierno les han hecho consultas sobre la organización de las concentraciones, número de personas, recorrido... No obstante, creen que su celebración no es conveniente en el contexto actual. «Deberían prohibir el 1 de mayo por razones sanitarias, igual que hicieron con el 8-M», afirman.

¿Por qué prohibieron la manifestación del día de la mujer si entonces la incidencia era de 236 casos y no hacen lo mismo con la de los trabajadores si la tasa es 156 puntos superior? Porque entonces Madrid no estaba en campaña electoral y este primero de mayo servirá para que los partidos de izquierda azucen la campaña a escasos tres días de los comicios regionales.

En otros puntos del país se ha sido más cauto. En el País Vasco, el gobierno regional ha pedido a los ciudadanos que celebren el Día de los Trabajadores en sus respectivos municipios para evitar que la movilidad amplíe la transmisión de la Covid.

En Castilla y León han sido los propios sindicatos los que se han hecho responsables de la situación epidemiológica. Se harán actos en todas las capitales y cabeceras de comarca pero «respetando las medidas».

Por eso, en Valladolid, donde se espera más afluencia de público, los sindicatos mayoritarios CC. OO. han convocado una concentración en vez de la tradicional manifestación. «Es la mejor manera de garantizar el distanciamiento y la seguridad», explicaron los portavoces en rueda de prensa.

Este primero de mayo es el primer evento de gran envergadura para la nueva delegada en Madrid, Mercedes González Fernández, nombrada el pasado 30 de marzo. Inmersa de lleno en la campaña no pondrá cortapisas a la gran movilización prevista desde Cibeles a Sol y en la que con toda seguridad se podrá ver a los candidatos de partidos de izquierda a la presidencia de la Comunidad de Madrid

Los sindicatos de clase, Unión General del Trabajo (UGT) y Comisiones Obreras (CCOO) han avisado de que celebrarán el Primero de Mayo de este año con la convocatoria de un número de manifestaciones y concentraciones similar a las realizadas en 2019, «lo que supone recuperar plenamente la movilización presencial en las calles».

Aquel año, el último en el que se celebraron las marchas, los convocantes informaron de que acudieron unas 30.000 personas en la capital. En la plaza de toros de las Ventas, sin embargo, se sentarán 6.000 personas pudiendo mantener en todo momento la distancia.