Margarita del Val, ante el macrobrote de Mallorca: “Estamos en una nueva fase y será más difícil detectar los contagios”

Un viaje de fin de curso a Mallorca entre los días 12 y 18 de junio ha provocado un macrobote de Covid-19 con al menos 470 casos y seis comunidades autónomas implicadas, que ha obligado a practicar test y establecer cuarentenas a los estudiantes que estén o hayan viajado a la isla.

La viróloga e investigadora del CSIC, Margarita del Val, ha hablado sobre este asunto durante una entrevista en el programa Espejo Público de Antena 3. Del Val advierte de esto supone un riesgo para los familiares que tienen puesta una sola dosis de la vacuna de la vacuna Covid.

“Los padres de estos chicos aproximadamente estarán en su cuarentena y estos no están vacunados y la mayoría no tendrán riesgo, pero algunos en ese grupo de edad tienen un riesgo fuerte. Esto es un poco un ejemplo de la nueva fase en la que estamos entrando de la pandemia”.

Para la inmunóloga la pandemia de coronavirus no se ha acabado. “Se acabado la tragedia de tantos mayores muriendo, pero ahora mismo tenemos más personas que pueden transmitir el virus silenciosamente porque hay sensación de que vamos más tranquilos, de que vamos a poder volver en parte a la normalidad”. Y por otra parte, señala Del Val, “porque las personas vacunadas también pueden contagiar. Ahora sabemos que sí”.

Del Val hace referencia a un estudio en residencias que constata que las personas vacunadas se contagian tres veces menos, pero advierte de que “a lo mejor es como llevar la mascarilla o hacer actividades en el exterior”. “La vacuna en este sentido para los demás es como una medida más que no es nada infalible”, afirma la experta.

La viróloga considera que con la vacuna se puede estar incurriendo en varias omisiones de las medidas de seguridad que nos hagan volver a una situación de más riesgo. Recuerda de que hay que tener mucho cuidado con los interiores de los locales. “Se están estableciendo aforos, pero no se da importancia a la calidad del aire en interiores y es fundamental que el aire se renueve. Los sitios de interiores son lugares de macrocontagios”.

“Nadie enferma gravemente y lo detectamos cuando ya se ha extendido de una manera muy grande, a muchísimas personas de los cuales muy pocos tienen síntomas. Entonces, cada vez que detectemos un brote va a ser de muchas personas con una ramificación muy difíciles. Hay que valorar cuántos de estos contagios están ocurriendo en interiores, en sitios cerrados”, concluye.