Críticas

El Papa habla de «pecados» en la conquista de América

Críticas de la clase política española ante unas «sorprendentes» manifestaciones de Francisco sobre la evangelización en México

Desconcierto y rechazo por el perdón de Francisco en nombre de la Iglesia al pueblo mexicano en el bicentenario de su independencia. Es la reacción que ha generado tanto en la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, como en el portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros.

«No entiendo muy bien qué hace un Papa de nacionalidad argentina disculpándose en nombre de los demás», compartió ayer Espinosa de los Monteros sobre el asunto tras la reunión de la Junta de Portavoces. «A mí me sorprende que un católico que habla español hable así a su vez de un legado como el nuestro, que fue llevar precisamente el español, y a través de las misiones, el catolicismo y, por tanto, la civilización y la libertad al continente americano», expresó la líder madrileña del Partido Popular desde Washington, donde se encuentra de viaje.

El dirigente de Vox defendió que España tiene «muchos motivos» para «estar orgulloso» de su legado histórico y cultural y ha recordado que su promoción es uno de los principales asuntos a los que se dedica la fundación del partido, Disenso.

A la par, Isabel Díaz Ayuso calificó de «soprendente» que el Papa Francisco haya pedido perdón a México por «pecados» de la Iglesia durante la evangelización en la coquista de América. La presidenta de la Comunidad de Madrid defendió el legado español en América frente a la «leyenda negra» y las pretensiones de «revisión maniquea de la Historia» que está provocando en paralelo un auge «alarmante del indigenismo y el populismo».

Lo cierto es que las palabras del Papa que han desatado esta polémica no suponen un cambio en la línea de Roma. De hecho cuando Francisco pide perdón «por los pecados personales y sociales» cometidos por la Iglesia durante la conquista, lo hace enmarcado en una frase en la que cita a quienes les han precedido en la sede de Pedro. «En diversas ocasiones, tantos mis antecesores como yo mismo, hemos pedido perdón por los pecados personales y sociales, por todas las acciones u omisiones que no contribuyeron a la evangelización», expone literalmente Francisco.

De hecho, Juan Pablo II, durante un viaje a República Dominicana en 1992 se preguntó en un encuentro con indígenas: «¿Cómo podría olvidar en este V Centenario los enormes sufrimientos infligidos a los pobladores de este Continente durante la época de la conquista y la colonización?».

De la misma manera, Benedicto XVI en 2007 también llegó a apuntar que «Ciertamente el recuerdo de un pasado glorioso no puede ignorar las sombras que acompañaron la obra de evangelización del Continente latinoamericano: no es posible olvidar los sufrimientos y las injusticias que infligieron los colonizadores a las poblaciones indígenas, a menudo pisoteadas en sus derechos humanos fundamentales».

El propio Francisco en Bolivia en 2015 manifestó ya que «se han cometido muchos y graves pecados contra los pueblos originarios de América en nombre de Dios».

«Sanar las heridas»

En la misiva firmada por Francisco el pasado 16 de spetiembre, el Pontífice instó a no dejar de lado «las acciones que, en tiempos más recientes, se cometieron contra el sentimiento religioso cristiano de gran parte del peublo mexicano, provocando con ello un profundo sufrimiento».

No obstante, Francisco ha instado a no quedarse ahí y a «seguir dando pasos» para «sanar las heridas» y «cultivar un diálogo abierto y respetuoso entre las dieferencias» y finalmente «construir la tan anhelada fraternidad, priorizando el bien común por encima de los intereses particulares, las tensiones y conflictos».