Ríos de «sangre» tras la contaminación del aire por el efecto de la calima

La monitorización del Servicio de Vigilancia Atmosférica (CAMS) de Copernicus determinó ayer el desplazamiento de polvo sahariano por Europa occidental y central, y sus previsiones mostraron una gran cantidad trasladándose hacia el norte por Europa en los próximos días. Las previsiones del CAMS desde el 11 de marzo han mostrado un gran penacho de polvo con valores muy elevados de profundidad óptica de los aerosoles (AOD) y concentraciones de polvo atravesando la península ibérica, Francia y las regiones centrales de Europa entre el 15 y el 17 de marzo.

Su trayectoria ha provocado concentraciones en superficie muy elevadas de materia particulada (PM10), de hasta 250 microgramos por metro cúbico, aunque los datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente han registrado niveles superiores en muchos puntos de España. Esto supera el umbral promedio recomendado en 24 horas de la Unión Europea (UE), que es de 50 microgramos por centímetro cúbico.

Aunque ayer se redujo, al menos visualmente, el nivel de polvo en suspensión, lo cierto es que los índices de contaminación eran muy elevados en la Península, especialmente en el sureste.

A esto se suma que a partir de hoy se prevén fuertes precipitaciones que provocarán los conocidos «ríos de sangre» por el color rojizo del agua al mezclarse con el polvo sahariano. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) hoy habrá abundante nubosidad en todo el país con lluvias que pueden ser persistentes en el extremo oriental del Cantábrico y el área mediterránea, sin descartarlo en Baleares, así como viento intenso en la costa gallega y en zonas de la Comunidad Valenciana y la región balear.

El este de la Península continuará bajo la influencia de la borrasca «Celia», por lo que habrá abundante nubosidad en todo el país. Surgirán precipitaciones persistentes y localmente fuertes en zonas de la Comunidad Valenciana y Murcia.

En Baleares no se descarta que sean localmente fuertes. De forma más débil, dispersa y con tendencia a remitir por el oeste, pueden afectar a otras zonas de la mitad este peninsular, con la posibilidad de quedar incluso el cielo poco nuboso al final del día en zonas del tercio occidental. Por su parte, en Canarias, donde están acostumbrados a lidiar con estas tormentas de arena «importadas» del Sáhara, se esperan precipitaciones débiles en el norte de las islas de mayor relieve. Aunque la entrada de polvo sahariano se prevé menor, en la Península y en Baleares las precipitaciones aún irán acompañadas de barro.

Infartos y trombosis

En medio de este episodio «excepcional» en la Península, tal y como han definido los meteorólogos, desde el Ministerio de Sanidad siguen recomendando cerrar ventanas y puertas, beber agua y salir lo imprescindible y con mascarilla, además de evitar hacer ejercicio físico al aire libre. En algunas de las provincias más afectadas, como es el caso de Almería, se produjo un aumento exponencial de los pacientes que consultan por procesos respiratorios en el servicio de urgencias del Hospital Universitario Torrecárdenas. Por su parte, los ópticos recomendaron proteger e hidratar los ojos ante los episodios persistentes de calima para evitar irritaciones

El presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), Julián Pérez-Villacastín, advirtió de que la contaminación afecta a todo el cuerpo y «favorece las trombosis, los infartos y la descompensación de la tensión arterial». En declaraciones a Efe, el también jefe del servicio de Cardiología del hospital Clínico San Carlos de Madrid explicó que la contaminación produce irritación en los pulmones y en los bronquios que se transmite a todo el cuerpo y acaba produciendo inflamación sistémica y afectando a las arterias por dentro.