Polémica

La jueza impone otro nombre a la recién nacida de Vitoria

La familia ha anunciado que recurrirá la decisión a la Dirección General de la Seguridad Jurídica y Fe Pública en Madrid.

Fotografía de la mano de un bebé agarrando un dedo
Fotografía de la mano de un bebé agarrando un dedoPixabay/jarmolukCreative Commons

Una magistrada de Vitoria (País Vasco) obligó ayer a unos padres a poner a su hija «Zia» en vez del nombre que ellos habían pensado, «Hazia», que significa «semilla» en castellano, poniendo de este modo fina una polémica que se alargaba demasiado, ya que la pequeña nació el pasado 22 de octubre en un hospital de la ciudad vasca y aún no había sido inscrita en el registro.

Tras el nacimiento de la pequeña sus padres confiaron al hospital el trámite de solicitar formalizar el nacimiento, hecho que corre a cargo de un juez, pero la sorpresa para estos progenitores llegó cuando la magistrada encargada de ellono aceptó el nombre que los padres habían escogido para la recién nacida. El argumento de la jueza se basaba en que «no hay ninguna otra niña con ese nombre y que se trata de un sustantivo».

«Nos han dicho que han elegido Zia porque en latín significa lo mismo que Hazia en euskera, semilla, y porque en latín solo tiene esa acepción», según señaló la abuela de la niña a «El Correo Vasco». En este sentido, el problema podría residir en que una de las traducciones de este sustantivo es «semen».

Asimismo, añadió que los padres «pusieron especial esmero y lo eligieron con todo el cariño del mundo. A todos nos pareció un nombre precio soy nos gusta su significado», indicó la mujer.

Ante la negativa de la juez a llamar «Hazia» a la niña, los padres se personaron ante ella para que les explicara las razones, pero esta mantuvo su oposición y les instó a elegir otro nombre porque si no «ella misma elegiría uno». Ante esta situación, los progenitores se preguntan por qué se permiten en cambio los nombres de Ibai y Aritza «si también son sustantivos», o el de «Zigor », que significa «castigo».

La familia entró en contacto con la Euskaltz aindia (la Real Academia de la Lengua Vasca) para solicitar su opinión al respecto, aunque esta institución «no veía ningún problema» en llamar a la niña Haiza. La familia ha anunciado que recurrirá la decisión a la Dirección General de la Seguridad Jurídica y Fe Pública en Madrid.