El Papa: “Quisiera que nos uniéramos a quienes, aquí a nuestro lado, rinden homenaje a Benedicto XVI”

Francisco ha pedido oraciones por Benedicto XVI, cuyos restos mortales reposarán hasta mañana en la basílica de San Pedro cuando serán enterrados en las grutas vaticanas, después del funeral solemne. Durante la audiencia general de este miércoles que ha celebrado en el Aula Pablo VI del Vaticano, a pocos metros del lugar donde está expuesto el cuerpo del Papa emérito para que los fieles puedan darle el último adiós, Francisco, que no ha cambiado nada su agenda prevista para estos días, ha instado a rendirle homenaje y ha dicho que fue “un gran maestro de catequesis”. “Antes de comenzar esta catequesis, quisiera que nos uniéramos a quienes, aquí a nuestro lado, rinden homenaje a Benedicto XVI y dirigirle mi pensamiento a él, que fue un gran maestro de catequesis”, ha señalado el pontífice.

Del mismo modo ha destacado que su “pensamiento agudo y cortés” no era “autorreferencial, sino eclesial”. “Siempre quiso acompañarnos al encuentro con Jesús. Jesús, el Crucificado Resucitado, el Viviente y el Señor, fue la meta a la que nos condujo el Papa Benedicto XVI”, ha subrayado.

Mientras, miles de personas acuden sin parar a venerar la Papa Emérito.

Libro prologado

El Papa Francisco ha escrito el prólogo de un libro que recoge reflexiones espirituales de Benedicto XVI en el que destaca su capacidad de hacer una “teología de rodillas” y de buscar “una penetración cada vez mayor en el misterio de aquel Jesús que le había fascinado desde su juventud”.

“Su argumentación de fe fue realizada con la devoción de un hombre que ha entregado todo de sí mismo a Dios y que, bajo la guía del Espíritu Santo, buscaba una penetración cada vez mayor en el misterio de aquel Jesús que le había fascinado desde su juventud”, destaca el pontífice en el libro que lleva por título ‘Dios es siempre nuevo’ y que será publicado por la Librería Editora Vaticana (LEV) el próximo día 14.

Se trata de una antología de sus pensamientos espirituales que verán la luz después de su fallecimiento el pasado sábado su habitación del monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, donde residía desde que renunció al pontificado en 2013.

Francisco incide en que toda la Iglesia “estará agradecida para siempre” a Benedicto XVI por su labor para acercar el Evangelio a la gente: “El modo en que Benedicto XVI fue capaz de hacer interactuar corazón y razón, pensamiento y afecto, racionalidad y emoción, es un modelo fecundo sobre cómo hablar a todos de la fuerza disruptiva del Evangelio”.

La colección de pensamientos espirituales que recopila el libro muestra --según el Papa-- la “capacidad creativa de Benedicto XVI para investigar diversos aspectos del cristianismo con una fecundidad de imágenes, lenguaje y perspectiva que se convierten en un estímulo continuo para cultivar el precioso don de acoger a Dios en la propia vida”.