Naufragio con 21 fallecidos
El buque Ártabro termina la misión en el Villa de Pintaxo sin hallar ningún cuerpo de los 12 marineros desaparecidos
El pesquero gallego Villa de Pintaxose hundió en aguas canadienses el 22 de febrero de 2022 en un naufragio en el que fallecieron 21 de sus 24 marineros
El Ártabro, buque encargado de localizar y tomar imágenes submarinas en aguas de Terranova (Canadá) del barco gallego Villa de Pintaxo, naufragado en esa zona el 22 de febrero de 2022 causando la muerte de 21 de sus 24 marineros, ha dado este lunes por terminada su misión y ha puesto rumbo de vuelta a Galicia sin haber encontrado ninguno de los cuerpos de los 12 marineros desaparecidos. Los peritos consideran que los vídeos realizados por un robot submarino no tripulado y controlado por control remoto, Rov, son suficientes para aportar a la investigación que trata de aclarar las causas del naufragio.
"Han grabado todo lo que tenían que grabar", ha asegurado la portavoz de las familias, María José de Pazo, y aclaró que no se encontró ningún cuerpo de los doce marineros desaparecidos. El Ártabro partió el 17 de mayo del puerto de Vigo rumbo a la zona del naufragio para localizar el buque hundido. Gracias a un radar sonar, los técnicos encontraron el pasado jueves el Villa de Pitanxo a 700 metros de profundidad muy cerca de donde emitió su última alerta, hallazgo confirmado el sábado. A bordo del Ártabro van cinco peritos: dos designados por el juzgado, uno de la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos, otro de las familias y uno de la Agencia Europea de Seguridad Marítima. Las grabaciones servirán como prueba en la causa judicial abierta en el Juzgado Número 2 de la Audiencia Nacional.
El Ártabro se dirige a España y llegará a Vigo previsiblemente el próximo lunes 12 de junio, indicó Europa Press. El patrón del Villa de Pintaxo, Juan Enrique Padín, y su sobrino, Enrique Rial, sostienen que el motor se paró, entró agua rápidamente y se hundió. Sin embargo, esta versión se contrapone con el testimonio del tercero de los supervivientes, Samuel Kwesi, que asegura que la red se enganchó en el fondo, el capitán se negó a cortar los cables, el barco se escoró y se hundió. La armadora Pesquerías Nores y el patrón están acusados de 21 homicidios por imprudencia.
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