Entrevista

"Dependeremos de sistemas eficientes de almacenamiento de la elecricidad"

Cristina Santamaría es investigadora predoctoral en el CSIC. Con sólo 27 años acaba de ganar el concurso europeo «Young Chemical Influencer». La química también tiene tirón

Diana Oliver
Diana OliverCortesía

Todo lo que existe en el Universo está construido a partir de 118 elementos, los que conforman la tabla periódica. Esta afirmación es una de las maneras más sencillas de entender por qué la química es clave en nuestra vida. Cristina Santamaría (La Rioja, 1997)es «influencer» de química (@trivulgando, @avancesquímica). Y le va muy bien. Aunque pueda ser habitual encontrar a divulgadores de ciencia, salud, alimentación o bienestar en redes sociales, el ámbito de acción de esta joven investigadora no es tan conocido. Ella es experta en sistemas de almacenamiento de energía procedente de fuentes renovables, y el objetivo de su tesis doctoral es diseñar baterías más seguras, baratas y eficaces de las que actualmente están en el mercado, que son de litio. Es investigadora predoctoral en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y acaba de ganar el concurso «Young Chemical Influencer», promovido por el European Chemical Employers Group (ECEG) y la Federación Empresarial de la Industria Química Española (Feique). Hablamos con ella de como la química nos ayuda a entender el mundo.

¿Es posible divulgar sobre química de manera amena?

Sí, ¡claro! Pero es importante tener siempre en cuenta que para entender de ciencia hay que partir de una base. Por eso recomendamos empezar con la difusión de la ciencia desde edades muy tempranas. Se puede divulgar ciencia de manera amena, como por ejemplo hacemos en el CSIC a través de nuestro curso «Los Avances de la Química y su Impacto en la Sociedad». En el, intentamos explicar cómo los avances de la química influyen en nuestro bienestar de una manera rigurosa, pero a la vez amena, estableciendo relaciones con otras ramas del conocimiento, como por ejemplo la música, el cine, la literatura, entre otras áreas.

¿Por qué elegiste estudiar Químicas?

Para mí la química es fundamental para comprender el mundo que nos rodea. Todo nuestro mundo es química. Es una ciencia en constante evolución, y uno de los pilares del progreso tecnológico. Sin ella, no seríamos capaces de desarrollar nuevos materiales, medicamentos, tecnologías o soluciones para los desafíos globales. Por otra parte, la química tiene un impacto directo en la sociedad y en la mejora de la calidad de vida de las personas. Siendo químico puedes contribuir a desarrollar productos y procesos más seguros, eficientes y sostenibles, herramientas para proteger el medio ambiente o medicamentos para promover el bienestar de las personas.

¿Qué papel tiene la química en nuestra vida diaria?

Está presente en todo momento en nuestras vidas: en los medicamentos, en los alimentos que comemos, el agua pura tratada que bebemos, o en los productos de consumo como los componentes de un ordenador o de un teléfono móvil. La química también contribuye de forma esencial a la mejora de la alimentación y la higiene, junto con otras ciencias y tecnologías.

¿Cuál es el objetivo de tu investigación?

Encontrar sistemas de almacenamiento de energía procedente de fuentes renovables con una gestión eficiente de los recursos, reduciendo la generación de contaminantes ambientales responsables del cambio climático. Uno de los problemas que existen con las energías renovables es que no se puede controlar cuándo y en cuanta cantidad las vamos a obtener. Dependemos de variables incontrolables como son el clima, el viento, el sol… Por ejemplo, en energía solar, hay un pico de producción entre las 9:00 y las 17:00 horas, pero en ese tramo es cuando menos electricidad utilizamos. Si fuésemos capaces de almacenar ese excedente de energía para poder suministrarlo en horas donde la usamos más, como pueden ser por la noche, no tendríamos que depender de energías no renovables como el gas o el carbón. Por eso buscamos un tipo de baterías que sea baratas, sostenibles y seguras.

Las que usamos actualmente ¿no lo son?

Las baterías que se usan habitualmente en los móviles y en los portátiles están hechas de litio, que es un material muy poco abundante que se extrae de salmueras y de arcillas que, además, están localizadas en zonas muy recónditas del planeta –y, en la mayoría de los casos, conflictivas–. Por eso buscamos alternativas más abundantes, para que el almacenaje de la energía sea posible y asequible.

¿Y qué materiales proponéis?

Nosotros proponemos el sodio, que es el sexto elemento más abundante de la corteza terrestre y, además, está distribuido homogéneamente en toda la superficie del planeta. El sodio se extrae del cloruro de sodio por un proceso que se llama electrólisis, que es bastante fácil y asequible.

¿Que ha supuesto para ti recibir este premio?

La divulgación científica es una de mis pasiones y creer en la importancia de compartirla a través de las redes sociales es fundamental, considerando que estas plataformas son la principal fuente de información para los jóvenes en la actualidad. A través de las redes puedo llegar a un gran número de personas y transmitir conceptos científicos de manera accesible y entretenida. Es importante aprovechar estas plataformas para fomentar el interés por la ciencia entre los jóvenes, ya que son ellos quienes construirán el futuro y enfrentarán los desafíos científicos y tecnológicos que se presenten.