Salud

Sueño polifásico: dormir mucho o dormir poco para aumentar la creatividad, esta es la cuestión

El sueño polifásico es una estrategia de descanso utilizada por algunas personas para aumentar la productividad y la creatividad. A Leonardo da Vinci y a Salvador Dalí, les funcionaba

El pintor surrealista Salvador Dalí
El pintor surrealista Salvador DalíWikimediaWikimedia

Cuentan las crónicas de la época que Leonardo da Vinci tenía un hábito de descanso muy particular, tan solo 20 minutos cada cuatro horas eran suficientes para el genio que, según decía, le permitía estar más tiempo despierto para sus cosas. A este método de descanso Leonardo da Vinci lo llamaba “sueño interruptus”. Otro genio que llevaba el mismo método de descanso fue Salvador Dalí a quien le bastaban unos minutos de descanso para “revitalizar su alma física y psíquica”. Dormía dos horas al día distribuidas en periodos de 20 minutos cada cuatro horas. Dalí lo llamaba “el descanso de la cuchara”. Consistía en sujetar una cuchara metálica con sólo dos dedos de la mano izquierda y colocaba en el suelo un plato, justo debajo antes de quedarse dormido, cuando la cuchara caía al plato, el genio se despertaba. Esta manera de dormir durante cortos periodos de tiempo cada determinadas horas, se conoce como sueño polifásico, una estrategia de descanso utilizada por algunas personas para aumentar la productividad y la creatividad. A Leonardo da Vinci y a Salvador Dalí, les funcionaba

El sueño es una necesidad biológica que permite restablecer las funciones físicas y psicológicas de una persona para que funcione a pleno rendimiento durante el día. Dormimos por la noche para poder estar despiertos de día. El organismo necesita una media de siete horas de sueño cada 24 horas, sin embargo, no todo el mundo tiene las mismas necesidades de descanso, por eso existen varias formas de dormir. “La mayoría de las personas duermen una media de seis o siete horas durante la noche, es lo que se conoce como sueño monofásico. Otras duermen en dos tramos de sueño, uno de cuatro a seis horas durante la noche y una siesta después de comer, esta forma de descansar es el sueño bifásico. El sueño polifásico concentra periodos de sueño de no más de tres horas seguidas repartidos entre el día y la noche, reduciendo el tiempo total de sueño” explica la doctora Irene Rubio Bollinger, Neurofisióloga y responsable de la Unidad del Sueño del Hospital Quirónsalud Sur.

En los países desarrollados, una gran parte de las personas adultas tienen el sueño monofásico, sin embargo, en zonas donde no ha llegado la electricidad se sigue el patrón del sueño bifásico, “Esto indica que el sueño bifásico es tremendamente biológico y por eso sería el tipo de sueño natural que nuestro organismo necesita, pero este patrón de sueño cambió con la era industrial”, añade la Neurofisióloga.

El sueño tiene 4 fases pero la profundidad del mismo es mayor durante el primer tercio de la noche (sueño NO-REM). Las ondas cerebrales de alta frecuencia y baja amplitud que tenemos cuando estamos despiertos, van transformándose en ondas de menor frecuencia y mayor amplitud a medida que el sueño va siendo más profundo. Los músculos se van relajando poco a poco y el ritmo cardiaco y respiratorio se hace más lento, así como los movimientos oculares que se tienen al comienzo del sueño. Durante el sueño REM el cerebro y el organismo “cargan las pilas” y aunque se sueña en todas las fases, se hace más en la fase REM. El sueño REM ayuda a consolidar lo aprendido durante el día, es decir, consolida los recuerdos.

Doctora Irene Rubio Bollinger, Neurofisióloga y responsable de la Unidad del Sueño del Hospital Quirónsalud Sur
Doctora Irene Rubio Bollinger, Neurofisióloga y responsable de la Unidad del Sueño del Hospital Quirónsalud SurQuirónsalud

No obstante, hay personas que piensan que dormir es una pérdida de tiempo ya que durante las horas de sueño podrían estar haciendo otras cosas más productivas y prefieren dividir el tiempo de sueño en periodos (sueño polifásico) y así, al alternar periodos cortos de sueño y vigilia creen mejorar su rendimiento. Sin embargo, estudios científicos aseguran que el sueño polifásico tiene sus inconvenientes, “dormir menos de 6 o 7 horas de un tirón puede producir una falta de sueño que se va acumulando y puede provocar problemas de salud y afectación de capacidades cognitivas, además de alterar la secreción hormonal o provocar alteraciones metabólicas que pueden influir en el desarrollo de enfermedades como la diabetes o la hipertensión” añade la doctora Rubio.

Así como Leonardo da Vinci y Salvador Dalí, utilizaban el sueño polifásico para su descanso, otros genios como Albert Einstein, dormía 12 horas seguidas y aseguraba que durante el sueño se producían muchos de sus descubrimientos. Esto quiere decir que las necesidades de descanso y de sueño de cada persona deben ajustarse a sus circunstancias para que sean saludables. Para algunas profesiones como médicos o pilotos de avión, que cambian continuamente sus ciclos de descanso, el sueño polifásico podría ser el más adecuado.