Cargando...

Prevención

El error que no debes cometer al comprar la baliza V16 obligatoria en 2026: mucha gente cae en la trampa

Estos dispositivos de preseñalización serán obligatorios en todos los vehículos a partir de 2026

Una baliza V16 La Razón

Así lo ha confirmado la DGT: la obligatoriedad de la baliza V16 será un hecho a partir del próximo enero. De acuerdo al reglamento de la agencia, todos los vehículos tendrán que estar equipados con uno de estos dispositivos de preseñalización, indispensables para garantizar la seguridad en carretera.

Fabricantes, distribuidores y demás apresuran las últimas semanas del año para ponerse al día con la nueva normativa, pero el tiempo apremia y es complicado conseguir una baliza. Por ello muchas empresas han optado por importarlas desde Asia, concretamente China. ¿Qué tan segura es esta estrategia? En este artículo repasamos los riesgos a los que nos exponemos con esta práctica.

La fiabilidad en torno al tiempo de espera

Los proveedores asiáticos enfrentan retrasos persistentes en sus plazos de entrega, que en la mayoría de los casos superan los 90 días, especialmente durante campañas de gran volumen. La situación se ve agravada por factores externos difíciles de prever, como la saturación de rutas marítimas y portuarias, controles aduaneros impredecibles y problemas en el transporte terrestre posterior.

Estas demoras impactan directamente en la disponibilidad y la calidad de los productos, que a menudo llegan fuera de tiempo, sin verificaciones completas o sin margen suficiente para cumplir con la normativa vigente. Eventos estacionales, como el Año Nuevo Chino, incrementan aún más la complejidad logística, dejando a las empresas en una posición de incertidumbre y limitada capacidad de planificación.

Cuestión de plazos

El pago total o parcial por adelantado es una práctica común en las importaciones desde China, pero deja al comprador completamente expuesto al riesgo financiero. No existen garantías sobre el cumplimiento de los plazos de entrega y la verificación de la calidad de los productos se realiza únicamente una vez que la mercancía ha llegado, si es que llega.

Esta dinámica aumenta la vulnerabilidad de las empresas, que pueden perder no solo tiempo, sino también la inversión en productos que no cumplen con los requisitos técnicos o legales exigidos por la DGT. La falta de controles previos obliga a operar bajo incertidumbre, complicando la planificación logística y financiera de las importaciones.

La ausencia de acompañamiento tras la venta

El servicio posventa de productos importados, como las balizas desde Asia, suele ser prácticamente inexistente. La mayoría carece de soporte técnico en España, stock de repuestos, garantías efectivas en territorio nacional y actualizaciones de conectividad. Esto deja cualquier fallo de fabricación o problema de funcionamiento sin solución práctica, afectando tanto al cliente final como a la reputación del distribuidor.

Además, muchas unidades no son sometidas a pre-test durante la fabricación debido a la falta de servicio de 'roaming', lo que impide asegurar su correcto funcionamiento en España. La ausencia de control previo y asistencia posventa aumenta significativamente el riesgo operativo para empresas que dependen de estos productos para cumplir con sus compromisos comerciales y normativos.

Apostar por el producto nacional

Frente a los riesgos de importación desde Asia, tenemos el ejemplo de la baliza V16 LED ONE Connected. Fabricada en España por Erum Vial, ofrece una alternativa segura y confiable. Con homologación oficial de la DGT, entrega inmediata y servicio posventa local, elimina la incertidumbre logística y los pagos adelantados que caracterizan a los proveedores extranjeros.

El producto garantiza conectividad activa hasta 2041 mediante Vodafone NB-IoT y se produce de manera sostenible, utilizando plástico reciclado sin embalaje adicional. A medida que se acerca la fecha límite de obligatoriedad de las balizas V16, optar por una fabricación nacional permite cumplir la normativa, proteger la inversión y asegurar soporte técnico directo, evitando los problemas habituales asociados a la importación desde China.