Avance

Un fármaco experimental frena el cáncer terminal de 20 pacientes

El medicamento se llama ATX-101 y, a diferencia de la quimioterapia, solo actúa sobre las células cancerosas

Aunque en un 60% de los casos se cura con quimioterapia, del 40% restante, hay un 10-15% que no responder al tratamiento inicial
Una persona sometiéndose a un tratamiento con quimioterapia DREAMSTIMEDreamstime

Un grupo de investigadores de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología (NTNU) y una empresa derivada de la universidad, APIM Therapeutics, han desarrollado un prometedor fármaco contra el cáncer dirigido exclusivamente a las células cancerosas. Se llama ATX-101 y es una proteína de penetración celular dirigida a PCNA (antígeno nuclear de proliferación celular) que estos científicos llevan estudiando más de 18 años, y cuyo desarrollo como fármaco antitumoral ha costado 20 millones de euros. Su gran ventaja frente a los tratamientos existentes es que solo actúa sobre las células cancerosas estresadas, dejando a un lado al resto de células sanas del organismo, al contrario que otros tratamientos como la quimioterapia, informa Europa Press.

Lo que ha logrado ya es Historia. El medicamento se ha probado en 20 pacientes con cáncer de ovario terminal que ya habían probado todos los tratamientos disponibles y, como último recurso, optaron por este medicamento experimental. Los ensayos tuvieron lugar en Australia, donde hay clínicas especializadas en probar nuevos medicamentos.

Los resultados de estos ensayos, que han sido publicados en la revista de investigación sobre el cáncer Oncogene, muestran que el 70% de los pacientes que probaron el medicamento se encontraban estables al cabo de seis semanas. Doce continuaron con la medicación y se mantuvieron estables durante 18 semanas. Y una mujer tomó la medicación durante 17 meses y permaneció estable durante más de dos años. Estos datos revelan que, con este medicamento, el cáncer dejó de crecer.

El objetivo de las pruebas realizadas en Australia no era principalmente comprobar si el medicamento funcionaba, sino determinar si era tóxico para los seres humanos, y comprobaron que no lo era. En experimentos de laboratorio y con animales ya se había demostrado que el medicamento mantenía el cáncer controlado, y lo vencía.

En este sentido, la catedrática de medicina molecular en la NTNU y autora principal del estudio, Marit Otterlei, explica que "la quimioterapia afecta a todas las células, incluidas las normales, como las de los folículos pilosos, por lo que afecta a todo el cuerpo y tiene muchos efectos secundarios, como la caída del cabello". Por ello, una de las diferencias de este medicamento con otros tratamientos es que los enfermos de cáncer evitan perder el pelo.

"ATX-101 puede utilizarse como único tratamiento. Puede estabilizar el cáncer, como demuestran los estudios publicados recientemente, pero el medicamento también puede ayudar a que la quimioterapia funcione aún mejor, de modo que no sea necesario administrar tanta", afirma Otterlei.

El desarrollo del fármaco ha entrado en la fase II, sonde se comprobará su eficacia. El medicamento se probará ahora en Estados Unidos en pacientes con sarcoma, un tipo de cáncer del tejido conjuntivo. En Australia, se probará en pacientes con cáncer de ovario. Ambos ensayos clínicos se realizan en combinación con quimioterapia.

No obstante, aunque los resultados de los ensayos han sido buenos, Otterlei insiste en que "aún queda mucho por recorrer" ya que, "muchos medicamentos pueden funcionar pero no llegan a desarrollarse porque la industria farmacéutica no acepta proyectos de los que no pueda obtener beneficios".