Nueva York

La última carta del «Titanic», subastada por 144.000 euros

La carta de un pasajero en el Titanic, escrita tan sólo horas antes de que el barco impactase contra un iceberg, se vendió por 144.000 euros

Una carta de un pasajero en el Titanic, escrita tan sólo horas antes de que el barco impactase contra un iceberg y se hundiese en su primer y único viaje, se vendió este fin de semana en una subasta por 119.000 libras (144.000 euros). La misiva fue escrita por los supervivientes británicos Esther Hart y su hija de siete años Eva, que iban en busca de una nueva vida en Canadá. La casa de subastas Henry Aldridge and Son dijo que se cree que el precio podría ser un récord para una carta del Titanic. "Había mucho interés", dijo un portavoz. "Hemos vendido otras cartas del Titanic, pero nunca alcanzamos una cifra parecida".

El Titanic se hundió la noche del domingo 14 de abril de 1912, en el quinto día de su primer viaje desde Southampton a Nueva York. Más de 1.500 pasajeros y miembros de la tripulación perdieron sus vidas en la tragedia, incluyendo al marido de Hart, Benjamin. La carta, escrita en papel especial y encabezada 'A bordo del RMS Titanic' y completada con un sobre con la bandera de la White Star Line grabada, estaba dirigida a la madre de Hart en Chadwell Heath, al este de Londres. Cuenta cómo Esther Hart sufría los efectos del mareo y cómo sentía el frío. "Todos mis seres queridos", comienza. "Como veis, es el mediodía del domingo y estamos descansando en la biblioteca después de almorzar. Ayer estuve muy mal todo el día, sin poder comer o beber, pero hoy ya estoy mejor".

"Los marineros dicen que hemos tenido un tiempo maravilloso hasta el momento. No ha habido ninguna tempestad, pero Dios sabe cómo será cuando ocurra. Hay muy buen tiempo, pero con un frío y un viento terrible", dice la misiva. La carta, con una dulce despedida de la joven Eva en el final, sobrevivió porque estaba en el bolsillo de la chaqueta de Benjamin la cual había prestado a su esposa para protegerla del frío cuando evacuaban el coche. El no sobrevivió al desastre. Hart y Eva, que más tarde recordaron los acontecimientos en su autobiografía «Sombra del Titanic» fueron rescatados por el HMS Carpathia. En el libro, Eva escribe sobre su madre: "La carta que había escrito ese domingo en el Titanic nunca fue enviada. La encontró en el bolsillo de la chaqueta de piel de mi padre después de que nos rescataran y para ella siempre fue un recuerdo de aquel trágico viaje y de la pérdida de su marido". Eva murió en 1996 a los 91 años.