El verano ya está aquí y con él llegan las primeras olas de calor del año. En ciudades como Madrid, Sevilla o Valencia, los termómetros ya superan los 38 °C, y en muchas zonas del interior peninsular se combinan las altas temperaturas con niveles de humedad que agravan la sensación térmica. Ante este escenario, el aire acondicionado se convierte en un aliado indispensable para sobrellevar los días más extremos.

Por eso, saber a qué temperatura debes programar el aire acondicionado es más importante que nunca. No solo se trata de sentirte cómodo, sino de encontrar el equilibrio entre confort y eficiencia energética, algo clave para no llevarte un susto a final de mes.

¿Cuál es la mejor temperatura para el aire acondicionado en verano?

El Departamento de Energía de EE. UU. y el programa Energy Star recomiendan ajustar el termostato a 26 grados para mantener un ambiente cómodo y eficiente. Esta temperatura permite controlar la humedad y evita un consumo excesivo de energía.

No obstante, la realidad es otra. Una encuesta de Consumer Reports reveló que la mayoría de las personas con aire acondicionado central configuran su casa a 22 grados y muy pocos optan por temperaturas superiores a 24 °C.

¿Y si no estoy en casa?

Si vas a estar fuera durante varias horas, no apagues el aire, pero ajusta la temperatura unos 7 grados más alta. Esto puede ahorrarte hasta un 10 % en tus facturas anuales, según el Departamento de Energía.

Por ejemplo, si lo tienes a 26 grados mientras estás en casa, súbelo a 33 grados cuando salgas. Esto evita que el sistema trabaje de más para volver a enfriar el hogar más tarde.

Trucos para mantener tu casa fresca sin subir el consumo

Además del aire acondicionado, hay estrategias sencillas para combatir el calor de forma eficiente:

• Cierra cortinas y persianas, especialmente en las horas de mayor sol.
• Sella fugas de aire alrededor de ventanas, puertas o enchufes con burletes o masilla.
• Evita usar el horno o la estufa en las horas más calurosas.
• Ventiladores sí, pero con precaución: no enfrían el aire, solo lo mueven. Apágalos si no estás en la habitación.
• Ubica bien el termostato: no lo pongas cerca de fuentes de calor o frío (como ventanas soleadas o unidades de aire).

¿Por qué el aire acondicionado se ha vuelto tan esencial?

Según datos de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), el uso de aire acondicionado ha aumentado en todo el país. El motivo es que cada vez hay más días de calor extremo, en parte debido al cambio climático.

En estas condiciones, el aire acondicionado no solo es una cuestión de confort, sino también de salud pública y seguridad. Las olas de calor pueden provocar enfermedades graves si no se toman medidas preventivas.