¿Se ha despertado el gigante?

Son numerosas y jugosas las novedades que ha lanzado Google en su reunión de desarrolladores.

Como cada año en su congreso de desarrolladores, Google ha presentado novedades esperables, sorpresas deseables y nos ha abierto boca para los proyectos que se vienen.

Una de ellas es Google Photos. Entre tus archivos, sumando ordenadores, portátiles, cámaras y smartphones podemos acumular un número de imágenes muy por encima de las cuatro cifras. Gestionarlas todas es un trabajo arduo y a menudo nos sorprendemos hallando fotografías que creíamos perdidas u olvidadas. Con la mente puesta en poner algo de orden en este caos fotocromático, Google ha presentado Google Photos. Como sucede con el sistema operativo de Apple, aquí todas las imágenes, sean del dispositivo que sean (siempre que tenga conexión a la red), se coordinan en la nube. Lo increíble es que, desde hoy mismo, el espacio para subirlas allí es ilimitado. Hasta 16MP para las fotos y vídeos de hasta 1080p, un golpe de efecto y en la mesa para webs como Dropbox o OneDrive. De modo que ya no hay que seleccionar fotos o reducir su tamaño para archivarlas. Google Photos es muy intuitivo y fácil de manejar. Sincronizar, hacer copias de seguridad y organizar por fecha y lugar es muy sencillo, lo cual, viendo cómo funcionan otros sistemas operativos, se agradece. La búsqueda de imágenes en nuestro archivos es muy simple, eso sí, hay que tomarse un tiempo para etiquetar todas las imágenes para que hallarlas sea cuestión de un solo paso. ¿Otra ventaja? Está disponible en Android, iOs y versión web.

Más novedades. Google Now se ha lanzado a la misma categoría que Siri. Y busca una competencia directa. Por ejemplo, da el pistoletazo de salida a una nueva característica que permite a esta aplicación examinar todo lo que ocurre en la pantalla, decidir qué hacer y ejecutar una serie de acciones. Esto en la acción se traduce en, valga la redundancia, la interacción: se puede escuchar música y preguntar el nombre real del cantante o si aparece en alguna banda sonora. En un paso que a algunos puedes darles miedo, también recordará los correos enviados y si hay en ellos una invitación a cenar, incluye sugerencias de restaurantes en la zona o por preferencias relacionadas con búsquedas previas en, obviamente, Google. Esto incluye también la posibilidad de ver las críticas del restaurante. Google, después de años de aprendizaje e investigación, ha logrado que su asistente interaccione no sólo con nuestras búsquedas o preguntas, también con aquello que estamos viendo. Y para hacer que su aceptación sea más veloz aún, los desarrolladores no tienen que hacer nada al respecto, simplemente aparecer en las páginas de búsqueda de Google.

Otro gran salto que emprende este gigante es en la realidad virtual. Ya el año pasado había presentado al hijo de IKEA y la realidad virtual: CardBoard. Básicamente, una caja de cartón con unos cristales que permitía comenzar a jugar con la realidad virtual. La broma resultó tener mucha gracia: vendieron más de un millón de unidades, probablemente debido a su precio sumamente competitivo (unos 15 euros). CardBoard, a pesar de ser eficaz y económica, no terminó la carrera de fondo. Puede que sea porque nadie quiere ir por ahí con una caja de cartón colgada de la cabeza, pero la realidad es que le faltaba algo, un salto de calidad. Puede que por ello el proyecto Jump (salto en inglés) reciba este nombre. Jump se basa en adaptar la CardBoard a cualquier smartphone (aún los de 6 pulgadas), facilitar la puesta a punto y el desarrollo de contenidos propios (una de las mayores dudas si no la más importante , de la realidad virtual) y, por último, alzarse con el mercado de calidad. Con ello en mente se han aliado con GoPro para crear el buque insignia de Jump: la cámara. A simple vista parece un cinturón con cargadores para munición, pero se trata de una sucesión de lentes que graba imágenes en 360º y con su software las incorpora para crear un efecto único. Aunque la generación de contenido de calidad precisará una GoPro, en un par de meses, presumiblemente julio, se publicarán las instrucciones para crear esta cámara de 360º en casa. Con cualquier cámara. Y, para reproducirlo, la plataforma ideal no podía ser otra que una marca de la casa: YouTube, que muy pronto soportará este tipo de formato.

Modificaciones esperadas en Android, versión M, llegarán a finales de año. El proyecto Tango, un súper ojo capaz de realizar mapas de edificios, entornos abiertos, exterior o interior, sin dejarse distraer por multitudes u obstáculos también está a punto de despegar: Google se ha asociado con Qualcomm, uno de los grandes en semiconductores y comunicación «wireless» para hacer realidad el sueño de tener, como Superman «visión de rayos X». O al menos algo muy parecido.

Finalmente, la gran novedad va por el camino de los «wearables», pero que molan: los que no nos damos cuenta que llevamos. Todo gira alrededor de Project Jacquard. En la división ATAP de Google han logrado desarrollar unos hilos de tela conductivos que se sirven de la tecnología inalámbrica para ubicarse en prendas de vestir. El primer socio parecería ser Levis. Los «wearables» que Project Jaquard lanzará al mercado, aún no se sabe cuándo, se implementarán de modo invisible en la ropa y nos permitirán interactuar con nuestros dispositivos con movimientos, toques o roces. Recibir o bloquear llamadas con una sacudida de hombros, comprar entradas con un toque del puño de la camisa... El problema mayor será, sin duda, la lluvia.

Lo dicho, el gigante se ha despertado y apuesta fuerte al futuro, pero aún nos deja con una duda: ¿para cuándo veremos en la calle el Project Ara, el smartphone Lego, hecho con piezas modulares y que responde a las necesidades de cada usuario? Puede que el año que viene.