
Hogar
Usar suavizante con vinagre: por qué cada vez más gente lo hace (y cuándo evitarlo)
Lo que empezó como un truco casero se ha convertido en una tendencia viral: usar vinagre en lugar de suavizante. ¿Funciona realmente o puede dañar la ropa y la lavadora?

Las rutinas de limpieza del hogar se han convertido en contenido viral. En TikTok y YouTube, miles de vídeos muestran cómo mejorar los resultados de la lavadora con remedios caseros. Entre ellos, uno de los más populares es añadir un chorrito de vinagre blanco junto con el suavizante o incluso sustituir el suavizante tradicional por vinagre.
El argumento es simple: el vinagre, al ser un ácido natural, ayuda a eliminar residuos de detergente, neutralizar olores y mantener las fibras más suaves sin apelmazarlas. Además, es una opción más ecológica y económica que los suavizantes convencionales.
Qué ocurre realmente al combinar vinagre y suavizante

Los expertos en mantenimiento del hogar explican que el vinagre actúa como un suavizante natural gracias a su acidez leve, que disuelve restos de jabón y cal. Esto puede ser útil en zonas con agua dura, donde las prendas tienden a volverse ásperas tras varios lavados.
Sin embargo, mezclar directamente vinagre y suavizante en el mismo compartimento no es lo ideal. Ambos productos tienen composiciones químicas distintas -uno ácido, el otro más bien graso- y pueden anularse entre sí, reduciendo su eficacia o incluso dejando residuos en la lavadora.
La mejor opción, según los especialistas, es alternarlos: usar vinagre en un lavado y suavizante en otro, o colocar el vinagre en el compartimento del aclarado final.
Cuándo usarlo (y cuándo no)
El vinagre puede ser un gran aliado, pero no siempre es recomendable.
- Es bueno para: lavar las toallas, ropa deportiva o prendas con mal olor.
- No es bueno: en prendas delicadas, lana, seda o tejidos elásticos, ya que el ácido puede dañar las fibras con el tiempo. También se desaconseja su uso en lavadoras con componentes metálicos internos sensibles a la corrosión, como algunas más antiguas.
Una alternativa más natural y económica
Usado correctamente, el vinagre blanco destilado puede reducir el uso de suavizantes químicos y mantener la ropa fresca de forma más sostenible. Solo hay que recordar una regla sencilla: nunca mezclarlo directamente con otros productos químicos y, mucho menos, con lejía o amoniaco, ya que pueden liberar gases tóxicos.
En definitiva, el truco del vinagre funciona, pero como todo en limpieza, la clave está en saber cuándo y cómo aplicarlo.
✕
Accede a tu cuenta para comentar