Privacidad

Qué es la Lista Stop Publicidad y en qué se diferencia de la Lista Robinson

Pese a ser dos servicios destinados a que el usuario deje de recibir publicidad no deseada y sin consentimiento, existen diferencias que hacen del primero un servicio complementario a Lista Robinson

Las listas de exclusión publicitaria buscan erradicar las comunicaciones de marketing no solicitadas
Las listas de exclusión publicitaria buscan erradicar las comunicaciones de marketing no solicitadasDifoosion - IA

Si había una queja que ponía de acuerdo a todos los usuarios esa era la de recibir de forma reiterada e insistente llamadas y demás comunicaciones comerciales no solicitadas y, por tanto, no deseadas. Una práctica que ha campado a sus anchas en las líneas telefónicas y hogares de los usuarios y que supone una invasión en el día a día de los consumidores.

Y es que no solo a través del teléfono se producen las comunicaciones comerciales por parte de las empresas, aunque sigue siendo la vía preferida según un reciente informe de Facua: correo postal y electrónico, mensajes de texto y también las bandejas de entrada de las diferentes plataformas y redes sociales son la vía de acceso idónea para esa campaña de marketing que todas las firmas consideran que será la adecuada para todo el mundo, pero sin contar con el mundo.

Ante ese panorama existen varios mecanismos para acotar tales comunicaciones. Uno de ellos llegó desde el Gobierno el pasado mes de junio a través del Plan contra las estafas de suplantación de identidad y por SMS del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, una decisión legislativa que llegó como medida adicional a dos opciones adicionales existentes y a disposición de los usuarios: la Lista Robinson y otro servicio tal vez menos conocido y del que vamos a hablar hoy: la Lista Stop Publicidad.

Evitar comunicaciones con la inscripción en listas de exclusión publicitaria

Ambos servicios están respaldados por la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) y cuentan con ciertas similitudes, aunque la Lista Stop Publicidad presenta rasgos propios que buscan adaptarse a los tiempos. Si bien ambos son mecanismos ideados para la exclusión publicitaria y de ese modo restringir la recepción de publicidad no deseada, solo la Lista Stop Publicidad orienta su servicio además hacia las campañas publicitarias que se producen a través de canales digitales como redes sociales o aplicaciones de mensajería, pero vayamos por partes.

En primer lugar, hay que señalar que tanto la Lista Robinson como la Lista Stop Publicidad son servicios totalmente gratuitos en los que se pueden apuntar los ciudadanos mayores de 14 años para dejar de recibir publicidad no deseada. Al darse de alta en dichos servicios, el usuario evita las comunicaciones no deseadas y sin consentimiento previo por vía telefónica, correo postal, email, así como sms o mensajes multimedia.

Hasta ese punto llegan ambos servicios, Lista Robinson y Lista Stop Publicidad. Sin embargo, la segunda, contempla unos puntos adicionales muy interesantes por la evolución de las diferentes plataformas digitales. Resulta razonable que la Lista Stop Publicidad alcance más allá dada su “novedad”, puesto que vio la luz en enero de este año 2025. El motivo era claro: adaptar las herramientas a disposición de los usuarios para evitar los contactos comerciales no deseados también en el mundo digital y crear un complemento a la Lista Robinson para la publicidad en el universo digital.

Lista Stop Publicidad abarca el mundo digital

Con la creación de la Lista Stop Publicidad los usuarios pueden registrarse en dicho servicio a través de la página web habilitada para ello si desean dejar de recibir publicidad a través de canales como redes sociales y aplicaciones de mensajería como WhatsApp, además de los canales tradicionales. Otra de las ventajas que presenta la Lista Stop Publicidad es que ofrece la posibilidad de que el usuario indique de qué sectores de actividad no quiere recibir publicidad, algo que Lista Robinson no permite distinguir.

Como no puede ser de otro modo, las empresas que hacen campañas de marketing directo están obligadas a consultar este servicio además de la Lista Robinson. Otra de las diferencias entre ambos servicios está en el plazo de efectividad para el usuario: mientras que inscribirse en la Lista Robinson y dejar de recibir las comunicaciones publicitarias restringidas de manera plenamente efectiva puede ser de dos meses, la Lista Stop Publicidad muestra efectividad en la limitación de esas comunicaciones en un plazo de 30 días.

Así pues, con Lista Stop Publicidad estamos ante un servicio gratuito para los usuarios y consumidores y pensado para evitar esas comunicaciones comerciales no deseadas ni consentidas que pueden llegar tanto desde las vías tradicionales como desde las nuevas vías y plataformas digitales que las redes sociales y los servicios de mensajería han establecido como nuevos canales de comunicación y, con ello, como potencial escaparate para las compañías. Complemento necesario y adaptado a los tiempos para la Lista Robinson.

Si el usuario quiere obtener la mayor privacidad de cara a ese tipo de comunicaciones publicitarias invasivas y no solicitadas, la legislación actual y la Lista Robinson junto a la Lista Stop Publicidad han de ser garantes imprescindibles para que la seguridad y la tranquilidad vuelvan a formar parte de sus espacios personales.