Realidad Virtual

Uso de nuevas tecnologías para el tratamiento de trastornos alimenticios

Varias universidades españolas están aplicando la realidad virtual en trastornos como la bulimia o la anorexia con éxito.

Doctores simulación realidad virtual
La realidad virtual puede ser una forma de prevención y detección de trastornos alimenticios. DreamstimeDreamstime

La realidad virtual, al igual que su hermana menor, la realidad aumentada, ocupan a menudo un espacio vinculado a los videojuegos, el deporte…el ocio en general. Pero su uso es cada vez más frecuente en un área en la que su aplicación obtiene muy buenos resultados: la salud mental. Y uno de sus objetivos son los trastornos alimenticios. En términos básicos, la realidad virtual es una tecnología que se basa en imitar o emular el mundo físico a través de dispositivos como las gafas de RV. Y es precisamente esta capacidad para simular la realidad lo que aprovechan expertos de diferentes universidades de España para tratar la anorexia o la bulimia.

Científicos de la Universidad Jaume I han desarrollado un software llamado Virtualbody, que permite usar la RV en el tratamiento de las alteraciones de la imagen corporal, una de las características más importantes de la anorexia y la bulimia nerviosa. “El objetivo del software – explican desde el Laboratorio de Psicología y Tecnología de la universidad – es que el paciente pueda comer virtualmente determinados alimentos y comprobar lo que ocurre con ellos (si se engorda o no), que aprenda que el número del peso es relativo y depende de la constitución, edad y forma corporal, que pueda modelar y representar su imagen corporal, para después contrastarla con su cuerpo real. Que pueda además representar cómo le gustaría ser, cómo le ven otras personas, qué aspecto tendría cuando esté en su peso saludable, etc”.

La imagen corporal, y esto es la base del estudio de este tipo de trastornos, es la representación mental que hacemos de nuestro cuerpo y el modo en el que nosotros pensamos, nos ven los demás. Expertos de la Universitat de Barcelona, Bruno Oriol Porras, Marta Ferrer o Ana Martín-Garcés también utilizan la realidad virtual para tratar pacientes con bulimia nerviosa y otros trastornos alimentarios como la anorexia. La ventaja del uso de esta tecnología, reconocen, es que todas las variables se pueden controlar. Por ejemplo si hablamos de bulimia nerviosa, cuando la persona tiende a consumir muchos alimentos, se prueba la reacción del paciente ante estímulos cada vez más altos. Gracias a ello se puede evaluar también sus reacciones y cuándo llega la ansiedad: es ante la comida, ante la reacción de otros… Los expertos de la universidad catalana están desarrollando un ensayo clínico en diferentes centros del país (dos en Barcelona y uno en Madrid) para evaluar la efectividad de esta intervención en pacientes con anorexia nerviosa.

Mientras tanto, el Hospital Universitario de Ourense, en Galicia, también recurrirá al uso de la realidad virtual pero esta vez no para tratar sino para detectar casos de anorexia, algo fundamental en lo que a prevención respecta. De la mano de José Antonio Campos, perteneciente al área de Psiquiatría del hospital, se busca usar las gafas para medir la distorsión de las personas en cuanto a su imagen corporal. De este modo pueden estimar cuan cerca o lejos de la realidad está una persona al hablar de su propio cuerpo. Luego la percepción de enfrenta a la realidad. Esto tiene el objetivo de evaluar la gravedad del trastorno pero también sirve para que las personas vean la diferencia entre ambas y comiencen a comprender lo que están viviendo.