Avance
Curro, Ángela y una última noche lejos del palacio: así se rompe todo esta semana en "La Promesa"
Confesiones, secretos y decisiones drásticas marcan una semana que pone a prueba la lealtad, el amor y la dignidad de quienes viven en palacio

En los próximos capítulos de la serie de La 1 de RTVE, la tensión alcanza uno de sus puntos más delicados. El triángulo formado por Ángela, Curro y Beltrán se resquebraja cuando la hija de Leocadia lanza un ultimátum que nadie esperaba: si su madre no le permite pasar dos días a solas con Curro, no habrá boda. Lejos de oponerse, la señora de Figueroa, acorralada, acepta la petición con la esperanza de cerrar ese capítulo de una vez por todas.
La escapada de Ángela y Curro no es un simple capricho. Es su despedida, su última oportunidad para decirse todo lo que ha quedado atrapado entre sus miradas. Suben a la montaña en busca de silencio, pero lo que encuentran es una verdad aún más difícil de asumir: se aman, pero el destino ha decidido otra cosa. En ese entorno alejado de “La Promesa”, un malentendido tensa aún más la cuerda de una relación que ya estaba al límite.
Mientras tanto, en la finca, María Fernández estalla una bomba emocional: está embarazada y no quiere tener al bebé. Confía su secreto a Pía y a Samuel, que se vuelcan en protegerla. Pero el miedo es más fuerte que el apoyo. No quiere hablar con el padre del niño, ni enfrentarse a las consecuencias. Todo parece indicar que su decisión es definitiva.
Beltrán, el prometido oficial de Ángela, permanece ajeno a todo, convencido de que están preparando la boda. Incluso se sincera con ella y le revela que Leocadia le ofreció una dote generosa. Esa confesión no hace más que ensombrecer la situación. ¿Puede construirse un matrimonio sobre una transacción? La joven empieza a entender hasta qué punto ha sido utilizada como moneda de cambio.
En paralelo, Lope y sus compañeras descubren que sus recetas están siendo copiadas y publicadas bajo el pseudónimo de "Madame Cocotte". Las sospechas apuntan dentro del propio servicio, pero nadie quiere hablar. Cristóbal, por su parte, interroga a Lope directamente, pero este niega tener algo que ver. Vera entra en la lista de sospechosos, aunque asegura no estar implicada.
Y mientras todos estos dramas se desarrollan, Petra sigue forzando sus límites físicos y emocionales. Leocadia, sin piedad, ordena su despido y la califica como “material averiado”. Cristóbal, incómodo pero obediente, le comunica la decisión. Petra, rota pero digna, no se va sin dejar claro que aún le queda algo por decir.
El final de la semana llega con rupturas, pactos rotos y verdades no dichas. En “La Promesa”, nadie está a salvo de las consecuencias de sus decisiones.