Destinos Turísticos Inteligentes

Sostenibilidad, innovación, gobernanza, tecnología y accesibilidad son los principios rectores de los Destinos Turísticos Inteligentes, una tendencia global que en España está siendo impulsada en diferentes territorios con el apoyo de la Secretaría de Estado de Turismo, a través de SEGITTUR, con el fin de que cada vez sean más las localidades que se adhieran a este programa para hacer de ellos un referente en este tipo de turismo, en el que, por otro lado, ya son punteros algunos países del continente asiático.

España, un país pionero en fomentar los Destinos Turísticos Inteligentes

La creación en 2018 de la Red de Destinos Turísticos Inteligentes —también conocidos como DTI— fue un impulso determinante para que las ciudades se sumaran a convertirse en destinos que, a través especialmente de la tecnología —por ejemplo, con el uso de aplicaciones móviles que recomienda rutas personalizadas basadas en inteligencia artificial—, quieren ofrecer al usuario una experiencia de viaje óptima, una estrategia que también, y de acuerdo con el proyecto europeo Smart Rural 21, permitirá revitalizar la Europa rural. En este ámbito, podemos poner de ejemploAdeje, que preside la asociación de municipios turísticos de España. Este pueblo, al igual que Tenerife en general —la primera isla española que se convirtió en DTI—, se caracteriza por apostar por la sostenibilidad tanto social como medioambiental, la gobernanza, la accesibilidad y la innovación tecnológica. Sus atractivos turísticos, como su gastronomía tinerfeña, sus paisajes naturales, su oferta deportiva, aunados a lo dicho anteriormente, hacen de él un destino muy interesante para todos los viajeros que deseen disfrutar de una grata experiencia.

Es evidente, por tanto, que los DTI suponen una revalorización de los territorios, y en ese sentido, resulta muy interesante que las ciudades pertenecientes al grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad se hayan adherido a este programa. Esta decisión supone no solo comprometerse con los citados principios de los DTI, sino que también es un paso más hacia la conservación y la difusión del patrimonio cultural que define a estas ciudades españolas tan emblemáticas, como lo son Alcalá de Henares, Salamanca, Cáceres, Cuenca y Toledo, que se unieron ya en 2019. A ellas le han seguido Santiago de Compostela, Ávila, Baeza, Córdoba, Ibiza, Mérida, Segovia, Tarragona, Úbeda y San Cristóbal de La Laguna. De esa forma, su integración a esta red supone poner en marcha diferentes acciones —financiadas en buena parte por los fondos europeos de recuperación—, como, por ejemplo, la puesta en marcha de material promocional audiovisual y acciones de comarketing. Todo ello servirá para poner en valor estas ciudades y sus recursos: su gastronomía, el cicloturismo, el enoturismo, el turismo de compras, el turismo deportivo o, en definitiva, cualquier otra actividad que suponga incentivar el interés por estas localidades como próximo destino al que viajar.

Una mirada a los países asiáticos que están a la vanguardia en los DTI

Resulta interesante, tras haber analizado cómo y qué destinos han incentivado la puesta en marcha de políticas activas para fomentar un turismo sostenible e «inteligente», acercarse a algunos países asiáticos a los que se les reconoce por estar siendo punteros en fomentar este tipo de turismo. Podemos destacar, por ejemplo, la iniciativa del gobierno chino, el cual ha incentivado integrar nuevas tecnologías en el sector, así como un turismo que es respetuoso con el medioambiente. En relación con esto último, merece la pena mencionar la ciudad de Sanya, en la bonita isla de Hainan, un territorio que cada vez atrae a más turistas extranjeros, pero que, al mismo tiempo, se cuida de proteger su espectacular entorno natural, caracterizado por sus impresionantes montañas, selvas y costa. Resorts integrados en el medioambiente —que llegan a contar con instalaciones para utilizar la energía solar y con sistemas para el reciclaje de agua residual y de lluvia—, el incentivo por la reducción de residuos y el compromiso de que todos sus autobuses sean eléctricos son buenos ejemplos de las iniciativas que ha tomado este representativo territorio chino para promover un turismo sostenible.

Además de China, en el continente asiático hay otros ejemplos que impulsan este tipo de turismo, como es el caso de la Isla de Langkawi, en Malasia, un país comprometido a desarrollar las conocidas como smart cities y que se presenta en esta edición de FITUR 2022 como líder en una experiencia turística sostenible. Por otro lado, Indonesia es también un ejemplo, aparte de por su apuesta por un turismo sostenible, de cómo se quiere incentivar una mejor experiencia para los viajeros, en este caso destaca su programa para la «movilidad inteligente», garantizando un sistema de transporte que fomenta la seguridad y la movilidad saludable.

Tailandia, Indonesia y Vietnam, reconocido por fomentar en los últimos años el turismo sostenible y el uso de la tecnología —de hecho, en la pandemia han desarrollado aplicaciones para ver el grado de seguridad de los diferentes lugares y planificar un viaje seguro—, son otros tres destinos en los que los principios de los DTI se cumplen para garantizar la mejor experiencia a los viajeros.

Como conclusión, podemos afirmar que los Destinos Turísticos Inteligentes son una magnífica apuesta, que, tras los efectos perjudiciales de la pandemia del COVID-19 en el sector, puede verse como una oportunidad para ayudar al mismo, ofreciendo, simultáneamente, nuevas e interesantes vivencias a los turistas.

José Miguel Ramírez

@GlobalbcAsia