Más de 150.000 empleos turísticos se destruirán en dos meses por el coronavirus

El principal motor de la economía española, el sector turístico, es el gran perjudicado por la crisis del coronavirus. Así lo confirman su patronal, que espera que este fin de semana su actividad se reduzca un 92%. Es decir que prácticamente sea nula. Ante este dramático escenario, se estiman unas pérdidas de casi 19.000 millones de euros y una destrucción de 150.000 empleos directos en el sector en la hipótesis de que la crisis se prolongue sólo dos meses. Estas cifras podrían llegar a multiplicarse por dos en el caso de que la pandemia dure cuatro meses, en lugar de dos.

Por eso el vicepresidente de Exceltur, José Luis Zoreda de la Rosa, en declaraciones a La Razón, insta al Gobierno a que “esta misma tarde” facilite a las empresas, con independencia de su tamaño, la adopción de expedientes temporales de regulación de empleo. Expedientes que afectarán, según sus cálculos y si se prolonga la crisis solo dos meses, a 150.000 trabajadores de los 2,2 millones de personas que emplea el sector turístico. “Cuando superemos esta situación excepcional, estos puestos de trabajo se recuperarán”. De lo contrario, advierte del cierre de empresas y, por ende, de la desaparición definitiva de estos 150.000 puestos de trabajo.

Se trata de agilizar la gestión y la aprobación de Ertes al máximo de días. A su juicio, esta medida es imprescindible para evitar una mayor destrucción de empleo definitiva. En ese sentido, pide que los trabajadores acogidos al Erte, en el caso de sector turístico, al menos 150.000 personas, no pierdan sus períodos acumulados a las prestaciones por desempleo.

Además, solicita aplazamientos de los pagos de impuestos (IVA y Sociedades), así como un incremento del cien por cien en las bonificaciones de las cotizaciones sociales y la ampliación de la línea de crédito ICO aprobada este jueves por el Gobierno de 400 millones hasta, al menos, 5.000 millones de euros.

Fuentes consultadas del sector aseguran a este diario que el Ministerio de Economía está poniendo, de momento, objeciones a la adopción de estas medidas, porque pondría en juego el cumplimiento del objetivo de déficit presupuestario.

De ahí que Zoreda espere que lleguen a buen puerto las negociaciones que se mantienen en estos momentos en el seno de la Unión Europea y que permitan a España levantar el pie del acelerador de la reducción del déficit fiscal.

En ese sentido, alerta de que está en juego la desaparición de una parte muy relevante del tejido empresarial turístico español, que hoy contabiliza 457.000 empresas y aporta al producto interior bruto del país la nada desdeñable cifra de 157.000 millones de euros, el 12,3% del PIB.

Semana Santa, en el aire

Mientras, otras autonomías comienzan a aislar a sus poblaciones más afectadas por el coronavirus, Andalucía se resiste por el fuerte impacto económico a anunciar la suspensión de la celebración de la Semana Santa, Feria de Abril, El Rocío y el resto de festividades que tienen lugar a lo largo de abril, mayo y junio en esta autonomía. Fuentes consultadas por este diario aseguran que, de momento, “no urge tomar esta decisión y que se puede adoptar más adelante”.

No obstante, el Gobierno andaluz ya ha echado números del impacto económico que puede provocar la crisis del covid-19 en esta comunidad. En uno de los escenarios que baraja la factura del virus para los andaluces será elevada, en concreto, superará los 4.000 millones de euros.

De cumplirse ese hipotético escenario, el PIB autonómico retrocederá 0,25 puntos, como consecuencia de una caída del gasto turístico internacional y de las exportaciones del 2%. No obstante, esta hipótesis de trabajo está condicionada a la evolución de la pandemia. Por tanto, el impacto puede ser mayor al diseñado.