Internacional

La quema de ejemplares del Corán en Suecia y Dinamarca moviliza a los países islámicos

La escalada de tensiones comenzó a finales de junio cuando un ciudadano iraquí, refugiado en Suecia, prendió fuego a un Corán frente a una mezquita en Estocolmo

Suecia.- Manifestantes queman de nuevo un ejemplar del Corán frente al Parlamento sueco
Suecia.- Manifestantes queman de nuevo un ejemplar del Corán frente al Parlamento suecoEuropa Press

Los países islámicos han iniciado una movilización diplomática sin precedentes en respuesta a la quema de coranes que ha tenido lugar en Suecia y Dinamarca.

El pasado 22 de julio, la embajada de Irán en España rompió su habitual silencio para emitir un comunicado urgente en el que el líder supremo, Alí Jamenei, exigía a Suecia que entregara al autor de la quema de un Corán a los órganos judiciales de los países islámicos. El jefe de la teocracia iraní consideraba que el autor de este acto merecía el más severo de los castigos, destacando que esta postura era compartida por todos los sabios del Islam. Esta exigencia, a la vez que una amenaza, dejó claro que Irán no ignoraría este incidente, a pesar de que fue realizado por un ciudadano particular amparado por la libertad de expresión.

La situación se ha vuelto más tensa en las últimas semanas debido a una serie de incidentes relacionados con el libro sagrado. Todo comenzó a finales de junio, cuando un ciudadano de origen iraquí, cristiano y refugiado en Suecia, prendió fuego a un ejemplar del Corán frente a la mezquita más grande de Estocolmo, justo en medio de la Fiesta del Sacrificio de un animal (Eid al Adha). Este acto formaba parte de una manifestación contra las leyes rigoristas del islam, y se llevó a cabo con permiso de la Policía sueca, amparado por las leyes de libertad de expresión en Suecia.

Estos hechos desencadenaron una serie de reacciones. El Gobierno iraquí expulsó a la embajadora sueca en el país, mientras que centenares de manifestantes marcharon contra la embajada de Suecia en Bagdad y la prendieron fuego, incitados por el clérigo radical Muqtada al Sadr.

El pasado 22 de julio, otro incidente similar ocurrió en Copenhague, Dinamarca, donde un grupo ultranacionalista conocido como Patriotas Daneses quemó un ejemplar del Corán frente a la Embajada de Irak. Situaciones similares se han producido en otras partes de Suecia, con varias peticiones de permisos para quemar coranes, aunque no todas fueron autorizadas por la Policía. También se registró una solicitud de autorización para quemar una Torá, lo que generó protestas por parte de Israel.

La Unión Europea ha condenado las quemas. El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha dicho que la profanación del libro es una “clara provocación” y una “ofensa”. En la misma línea se ha expresado la ONU. La Asamblea General aprobó una resolución que condena todos los actos de violencia contra los libros sagrado