Coronavirus

UGT denuncia que ya hay “1.252” profesionales sanitarios contagiados en Andalucía y la “sangría” sigue

Málaga y Granada son las provincias que más positivos acumulan, y la categoría más afectada en la comunidad es la de los médicos

El Hotel Alcora de Sevilla tras ser adaptado como hospital para recibir pacientes con coronavirus
Personal sanitario ayuda a una anciana en el interior de un hotel de Sevilla adaptado como hospitalMaría José LópezEuropa Press

“Continúa la sangría” entre los profesionales sanitarios que combaten contra el coronavirus y lo hace “ante la pasividad” de las administraciones que continúan sin proporcionarles equipos de protección. Es la denuncia que realiza la Federación de Servicios Públicos del sindicato UGT Andalucía, a la que alcanza a diario un rosario de quejas procedente de un colectivo que tiene que hacer frente al Covid-19 desde la primera línea de respuesta.

La organización sindical cifra en “1.252” el total de infectados que existe en la actualidad en la comunidad, lo que supone, según sus cálculos,“el 23% del global de los positivos registrados. Por provincias, es Málaga la que se sitúa a la cabeza con 314 de esos profesionales contagiados, el 25,1%; seguida de Granada donde la cifra alcanza los 277, el 22,1%; y de Sevilla, que acumula 208, lo que supone el 16,6%. En Jaén los sanitarios que han causado baja son 139, un 11,1%, uno más que en Córdoba, donde anotan 138, un 11%. El número de infectados es de 106 ya en Cádiz, con un 8,5%; de 41 en Almería, esto es, el 3,3%; y de 29 en Huelva, con un 2,3%, a la luz de las estadísticas que maneja UGT.

La categoría laboral que se ha visto más afectada por el agresivo coronavirus es la de los médicos, con 369 contagiados en el mapa de la región, lo que significa el 29,5% del conjunto. Detrás se colocan los profesionales de la enfermería, con 304 casos, el 24,3%, a los que hay que sumar a los auxiliares en ese ámbito, que son 176 los que han dado positivo, el 14,1%.

Desde UGT aseguran que el personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS) “siente miedo, incertidumbre y rabia” por tener que trabajar en unas “condiciones lamentables” y ponen el foco en que la “clase política” no sea capaz de “proporcionarles el material” necesario para que puedan protegerse del contagio.