La calle más famosa de Triana amanece con una gigantesca pintada a favor del pueblo palestino

Operarios de la empresa municipal de limpieza del Ayuntamiento de Sevilla (Lipasam) ya han eliminado la enorme pintada con la que ha amanecido el muro de la calle Betis, al borde del río Guadalquivir, con un mensaje de apoyo al pueblo palestino.

El texto, escrito de color negro y con letras de gran tamaño, decía 'Palestina Libre' y se habría efectuado la noche de ese jueves. Desde el Ayuntamiento enviaron a primera hora varios operarios para pintar del blanco la zapata y ocultar el citado mensaje en la zapata del río. La pintada reivindicativa se observaba con claridad desde la otra orilla.

El alcalde de Sevilla, el popular José Luis Sanz, ha expresado su indignación ante lo que considera "un acto vandálico" que "destrozan nuestra imagen". Así lo ha expresado a través de su perfil en la red social X.

Más allá de este acto vandálico, puesto que se tratar de un espacio público, las muestras de apoyo se han producido en la capital andaluza a través de concentraciones organizadas por la plataforma Solidaridad Palestina, Comunidad Palestina en Sevilla y Mujeres de Negro contra la Guerra, para pedir que cese el "genocidio" implícito en el bombardeo del Ejército de Israel sobre Gaza.

El pasado fin de semana el Ayuntamiento de Sevilla ya denunció otro acto de incivismo, después de que la cruz de la plaza de Santa Marta apareciera vandalizada.

El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Gerencia de Urbanismo, ya ha comenzado a trabajar en la restauración de la cruz de la plaza de Santa Marta que quedó destrozada en la madrugada del pasado 22 de octubre. Con ello, el Servicio de Conservación de Monumentos ha tramitado este mismo lunes "de forma urgente" la recuperación de este bien patrimonial, que recuperará su aspecto original.

La rotura de la cruz que preside la plaza de Santa Marta se ha producido por debajo de la mitad de la columna. Tras analizar los restos encontrados en el suelo, los técnicos municipales han concluido que la fractura y posteriores desprendimientos se han producido como consecuencia de un acto vandálico al intentar "subir o colgarse" de uno de los brazos del crucero, cuyos pernos de hierro muestran signos de haber sido "doblados a causa de un gran peso". Los mayores daños se localizan en los brazos del crucero, permaneciendo el stipes y las figuras del crucificado y la Virgen que se encuentran en el mismo prácticamente intactos.