Recursos hídricos

Junta y Gobierno abren otro frente por las desaladoras

Cruce de reproches entre administraciones por unas infraestructuras que tardarán 5 ó 6 años en estar operativas para combatir la sequía

MADRID, 09/01/2024.- La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, comparece junto a la presidenta de Navarra, María Chivite, tras su reunión en la sede del Ministerio, este martes en Madrid. EFE/ J.P. Gandul
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, se reúne con la presidenta de Navarra, María Chivite.J.P.GANDULAgencia EFE

Nuevo conflicto. Otro cruce de reproches entre Gobierno de España y Junta de Andalucía. Esta vez a cuenta de las desaladoras, infraestructuras hidráulicas que tardan en ejecutarse entre 5 y 6 años y que, por desgracia, no paliarán las necesidades urgentes de la comunidad por la pertinaz sequía que la asola.

El Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) ha asegurado que entre la documentación remitida esta misma mañana por la Junta de Andalucía "no figura" el proyecto de la desaladora de la Axarquía, en Málaga, toda vez que ha apuntado que a fecha de hoy el Gobierno de España "no ha recibido el proyecto adaptado" para la nueva desaladora de Bajo Almanzora II del levante almeriense.

Así lo han aclarado desde el Ministerio después de que la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural haya calificado de "falsa" la información en torno a la financiación de los proyectos de desalación que el Gobierno de España tiene la obligación de acometer en el Levante almeriense y en la comarca de La Axarquía, tal y como establece el Plan Hidrológico Nacional vigente desde hace años.

De este modo, el Miteco ha apuntado que el acuerdo "establece, tanto para Cataluña como para Andalucía, que son las comunidades quienes aportan proyecto y terrenos para las nuevas desaladoras", precisando que ha recibido esta mañana información sobre la obra de la de la Axarquía, en Málaga, "en la que se da cuenta de la disponibilidad de terrenos", pero entre la documentación remitida "no figura el proyecto".

En el caso de la nueva desaladora de Bajo Almanzora II, ha señalado que la Junta de Andalucía "remitió un documento técnico en agosto de 2023, el cual fue analizado por Acuamed, que incorporó una serie de requerimientos"; sin embargo, añade, "a fecha de hoy el Gobierno de España no ha recibido el proyecto adaptado".

En este sentido, el Gobierno ha concretado que para llevar a cabo actuaciones de este tipo se debe remitir en primer lugar el proyecto y la disponibilidad de terrenos y, después, se realiza la declaración de impacto ambiental y la licitación y ejecución, al tiempo que ha añadido que cualquier administración "puede acometer" una obra de este tipo", ya que "no es competencia exclusiva del Estado".

Por último, el Ministerio ha especificado que esta dos obra fueron incluidas en el Real Decreto Ley 4/2023, que estableció medidas para paliar los efectos de la sequía, "por petición de la propia Junta de Andalucía".

Réplica de la Junta

El Gobierno andaluz ha dado este martes la réplica al reproche deslizado por el Ministerio de Transición Ecológica. En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, el consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul y portavoz del Gobierno andaluz, Ramón Fernández-Pacheco, ha asegurado que "las desaladoras las tiene que hacer el Gobierno", convencido de que se trata de "una competencia exclusiva" de la Administración del Estado, por lo que con esta premisa ha colegido que "la pelota está en su tejado", así como se ha quejado de que la actitud del Gobierno "tiene un punto de mala intención".

Fernández-Pacheco ha contrarrestado que "el Ministerio se quejaba de que la Junta de Andalucía no ha pedido los 200 millones" con una afirmación de que "Andalucía ni los ha pedido ni los va a pedir", convencido de que es el Gobierno la Administración que "las tiene que hacer" y para ello ha esgrimido que en el Real Decreto 4/2023 el Gobierno "reconoce que es su competencia" acometer las dos desaladoras previstas para el Levante almeriense y la Axarquía malagueña.

Sobre los pasos que ha dado el Gobierno andaluz, el consejero y portavoz ha explicado que este lunes se le envió al Ministerio de Medio Ambiente la puesta a disposición de los terrenos donde se ubicaría esas infraestructuras hídricas y que previamente había remitido al grupo de trabajo de ambas administraciones.

El resumen de la actividad de la Administración andaluza sobre el impulso a dos nuevas desaladoras la ha concretado en que "todo lo que tenía que hacer la Junta ya está hecho".

Fernández-Pacheco ha defendido que "de manera permanente" hay una relación entre Junta de Andalucía y Junta para afrontar la sequía y las infraestructuras hídricas, que ha concretado en el ejemplo de que la consejera de Agricultura, Carmen Crespo, se reúne "todos los meses" con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, encuentros que "van más allá del grupo de trabajo".

Se ha preguntado en voz alta por la actitud del Estado. "Por qué ese interés en confundir a los ciudadanos sobre las competencias de unos y otros", ha afirmado el consejero y portavoz, que ha querido entender que se hace para "desinformar", antes de reiterar que "no es competencia de la Junta" hacer las desaladoras, de manera que "la construcción es de ellos".

La semana pasada el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, explicaba a Europa Press el escenario de las desaladoras para afirmar que "Andalucía se ha dirigido al Gobierno de España, nos ha pedido apoyo y les hemos dicho que aquí estamos para apoyarles" acerca de que "nos han pedido dos nuevas desaladoras".

Para estos proyectos reclamó previamente que la Junta de Andalucía ponga a disposición los terrenos y la entrega de los proyectos, mientras que el Ministerio de Medio Ambiente se ocuparía de su licitación.

"En Cataluña y Andalucía les hemos dicho que nosotros nos hacemos cargo del anticipo de financiación y la licitación y ejecución de las obras", siguió afirmando al respecto.

"Una vez que (las desaladoras) estén culminadas, se entregarán en su caso para la gestión a la comunidad autónoma y las integraremos en la red de desaladoras de gestión del Estado, de mutuo acuerdo", dijo a Europa Press.

CAMPOS DE GOLF: MÁS DEL 80% EMPLEA AGUAS REGENERADAS

Cuestionado en la rueda de prensa por la propuesta de Adelante Andalucía para extender a los campos de golf las restricciones para el suministro de agua a la población andaluz que el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, anunció la semana pasada que se acometería a partir de primavera de seguir el ritmo actual de lluvias, Fernández-Pacheco ha asegurado que "al formular la petición se quiere hacer ver que el problema lo tienen los campos de golf".

En este sentido ha argumentado que "más del 80% de los campos de golf, la inmensa mayoría se riegan con aguas regeneradas, que es agua no potable", ante de considerar que "limitar el agua a los campos de golf puede tener éxito en términos demagógicos, pero es de poca aplicación real".

El jueves de la semana pasada, tras presidir Moreno la reunión del Comité de Expertos sobre la sequía, el portavoz parlamentario de Adelante Andalucía, José Ignacio García, habló de "injusticia hídrica" en caso de acordarse cortes en el suministro de agua para los vecinos y para la agricultura cuando se está regando "indiscriminadamente" campos de golf por toda Andalucía.

Adelante esgrime un estudio propio sobre los campos de golf en Andalucía, con el que ponen de manifiesto el peso en el consumo de 109 campos, que suponen el 25% de todas las instalaciones de España.

García explicó que "esos campos de golf gastan lo mismo que un millón de personas", para colegir entonces que "esto es una barbaridad", antes de explicar que "un metro cuadrado de campo de golf gasta entre 1.500 y 2.000 litros de agua al año" e insistir en que "esto no tiene ningún sentido".

Sobre el uso de agua regenerada, García replicó que "sus propios informes dicen que la mitad de los campos de golf de más de 18 hoyos usan agua potable, agua que se podría emplear para otros usos".