Ni llenado de piscinas privadas ni lavar coches fuera del establecimiento

La sequía es un hecho que hasta ahora se está notando a cuentagotas en las casas particulares pero que acabará por afectar al consumo humano. De momento, la agricultura y la industria son las más afectadas pero ya hay localidades turísticas que han tenido que tomar medidas, como es el caso de Torrox, en Málaga.

El Ayuntamiento ha prohibido el uso de agua potable en el riego de jardines y parques públicos y privados, el baldeo de calles y fachadas, el llenado o rellenado de piscinas privadas y el lavado de coches fuera de los establecimientos autorizados, con el fin de incidir en el ahorro de agua.

Estas medidas, recogidas en un bando firmado por el alcalde, Óscar Medina, se suman al corte ya establecido del suministro de agua en las duchas y lavapiés de playa, ha informado este miércoles el Ayuntamiento en un comunicado.

El regidor, que ha solicitado un "uso racional del agua" y ha pedido "comprensión" ante las dificultades puntuales que puedan producirse en el suministro, también ha prohibido el uso de agua potable en fuentes ornamentales, duchas o surtidores públicos sin circuito cerrado.

Medina ha recordado que, en agosto, Torrox llega a cuadruplicar su población y que estas medidas se adoptan por la sequía, la ola de calor y la llegada del puente de la Asunción, que coincide con la feria del núcleo de población de El Morche, por lo que se espera una alta demanda de agua por el aumento de visitantes.