Encuentro

La procesión Magna de Sevilla no se trasladará a otro día en caso de lluvia

El II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular, que arranca el 4 de diciembre, reunirá a personas procedentes de México, Guatemala, Francia y EE UU

Francisco Vélez, José Ángel Saiz Meneses y Joaquín de la Peña, ayer en el Palacio Arzobispal de Sevilla
Francisco Vélez, José Ángel Saiz Meneses y Joaquín de la Peña, ayer en el Palacio Arzobispal de SevillaLa RazónLa Razón

A diferencia de lo que ocurrió con la Magna Mariana de Jerez, que se trasladó de fecha por la lluvia que cayó el 12 de octubre, cuando estaba previsto celebrarse inicialmente, la procesión Magna de Sevilla que servirá de clausura del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular no se trasladará de fecha en caso de que la jornada del 8 de diciembre se presente lluviosa. Así lo aseguró el presidente del Consejo de Hermandades, Francisco Vélez, quien remarcó que «no se trata de una Magna, sino de una procesión extraordinaria de clausura». «No se va a retrasar de ningún modo ni a buscar nueva fecha si por inclemencias meteorológicas o de cualquier otro tipo no pudiera salir la procesión», aseguró Vélez, además de señalar que, en caso de suspensión, se devolvería el importe a las personas que han adquirido una silla.

En este punto, remarcó que el dinero recaudado por los asientos se destinará a los propios gastos del congreso, mientras que el excedente se dedicará a la obra social del encuentro, un proyecto enfocado a las personas sin hogar de Sevilla.

Vélez hizo estas puntualizaciones en una rueda de prensa en la que el arzobispo hispalense, José Ángel Saiz Meneses, dio a conocer los pormenores de la cita que arrancará el próximo 4 de diciembre. Tal y como aseguró, se trata de un congreso «de encuentro, celebración y amistad; debe ser un encuentro con Dios y comunión con los hermanos, un momento espiritual y de oración». Para los que vengan de fuera, que este acontecimiento «sea un testimonio de fe y apertura a lo trascendente». Seguidamente, subrayó la «reflexión y actualización, que nos dejará un corpus doctrinal para el futuro». El prelado advirtió de que «no se puede perder de vista la contemplación». «Se tiene que recuperar la dimensión contemplativa de la vida y el congreso nos ha de ayudar y dar un impulso en este sentido», subrayó. Para ello, se han organizado exposiciones «muy relevantes en distintos puntos de la ciudad».

El congreso reunirá a 1.832 personas de muy variadas procedencias, como México, Guatemala, Honduras, Francia, Suiza, EE UU, Chile, Buenos Aires y toda Andalucía. «La idea es poner a toda la Archidiócesis en modo congreso, tanto las parroquias, hermandades y movimientos», subrayó el arzobispo de Sevilla.