Buscar inspiración para elegir el mejor nombre de un primer hijo no es tarea fácil. Hay quiénes la encuentran en películas y quienes optan por su lugar de nacimiento. En esto último se inspiran muchos aragoneses, tal y como demuestra el registro civil: en los últimos años nombres propios de la tierra aragonesa como Isella o Lorien e, incluso, los que provienen de Pirineo oscense como Lizara, son muestras claras de ello.

Este último, por ejemplo, es uno de los nombres de niña que más fama ha ganado últimamente, sobre todo en esta majestuosa zona natural de la comunidad aragonesa. Según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística, en Aragón existen a día de hoy ya 41 mujeres llamadas Lizara, con una media de 9,8 años. Por tanto, es un nombre muy actual.

El pico de Sallent de Gállego que también inspira a los nuevos padres

Lo cierto es que la zona pirenaica, con pueblos apartados de las grandes metrópolis en los que la fabla aragonesa y otras tradiciones siguen conservándose con esfuerzo pese a la despoblación y el paso del tiempo, ofrece muchas posibilidades a los padres de 2025. Otro nombre propio, también con la media de edad muy baja, se ha puesto ahora de moda en la región por inspirarse en un pico de Sallent de Gállego.

Es un nombre muy singular, poco común todavía y precioso. Según los registros del Instituto Nacional de Estadística (INE), solo existen 80 personas en todo el país que se llaman así y la mayor parte son menores de 9 años que residen en Zaragoza, Huesca, y Pamplona. Es el nombre propio Anayet.

Quienes lo han coronado saben perfectamente el profundo significado de Anayet

El pico Anayet es uno de los escenarios naturales más imponentes de la comunidad aragonesa. Emplazado en el espectacular valle de Tena y muy cerca del popular pueblo oscense Sallent de Gállego, su casi insondable pico de 2.545 metros de altura lo convierten en una de las más respetadas cimas de la zona pirenaica aragonesa.

Los pocos escaladores que han podido coronarlo saben todo lo que significa Anayet: unas panorámicas inigualables de toda la cordillera y los picos más próximos. No hay que olvidar tampoco que en este mismo lugar se ubican los flamantes ibones de Anayet, unos extensos lagos de montaña con aguas cristalinas proveniente de la nieve de su cima que no dejan indiferente a ningún turista cuando los ve por primera vez..

No sería muy extraño pensar que muchos de esos aragoneses que han llamado a sus hijas Ayanet, lo hayan hecho por coronar la bonita cima del Pirineo. Desde luego, es un inmejorable recuerdo aragonés: sus hijas llevarán siempre el nombre de su hazaña pirenaica.