Comer bien

El espectacular restaurante con vistas a la playa donde comer el mejor arroz de toda Cantabria

Su tarta de queso fluida por el interior es el cierre perfecto para una comida en uno de los entornos más bonitos de Cantabria

El espectacular restaurante con vistas a la playa donde comer el mejor arroz de toda Cantabria
El espectacular restaurante con vistas a la playa donde comer el mejor arroz de toda CantabriaR. L. M.

Hay lugares que no necesitan presentación, pero sí una visita. El restaurante Las Olas, en la playa de la Maruca, es uno de ellos. Situado a escasos metros del mar, este restaurante combina la tradición marinera cántabra con una cocina cuidada, sin artificios, donde el producto es el absoluto protagonista.

El plato estrella, y motivo de peregrinaje para muchos, es su arroz que ofrece en muchas versiones y todas ellas son deliciosas: arroz con almejas, arroz con bogavante, arroz negro, arroz con rabo de toro caldoso, arroz con cachón, arroz mar y huerta y arroz señoret. Probablemente el mejor arroz que hayas comido en tu vida está en este lugar.

.Cocinado con mimo, con ese fondo potente que solo se logra con horas de dedicación y mariscos de primera, el arroz se sirve meloso, generoso, y con todo el sabor del norte. No es fácil encontrar un punto tan equilibrado entre técnica y sabor, pero aquí lo han conseguido. Pídelo porque es un acierto seguro y se sirven para un mínimo de dos personas, las raciones son abundantes y son perfectos para compartir.

Los pescados frescos, seleccionados cada día según la lonja, completan una carta en la que la calidad es innegociable. Lubinas, rodaballos, merluzas… todos tratados con respeto, en elaboraciones sencillas pero sabias. Y si el marisco es lo tuyo, aquí puedes empezar con unas almejas a la sartén, navajas o unos mejillones al vapor que saben a mar puro. Las zamburiñas merecen capítulo a parte, simplemente son deliciosas.

Pero hay algo que sorprende incluso a los más escépticos porque no suele ser frecuente que un restaurante hile tan fino desde el primer plato hasta el último: la tarta de queso. De aspecto imponente, cremosa, casi líquida en el centro, con un dorado que bordea lo caramelizado, se ha ganado un hueco en el corazón (y en la memoria) de los comensales. No es solo un postre; es un final perfecto. Si no puedes con ella, pídela para compartir, te aseguramos que no vas a arrepentirte.

El ambiente en Las Olas es relajado, con una atención cercana y sin prisas. El comedor, amplio y luminoso, se abre a unas vistas privilegiadas del Cantábrico, lo que convierte cada comida en una experiencia completa. Aquí, el tiempo parece ir más despacio, justo lo que todos buscamos en vacaciones.

Además, podrás disfrutar dándote un baño en la playa de La Maruca, recogida y discreta, con un encanto especial porque no tiene arena y a solo diez minutos de Santander. No te pierdas este sitio para darte un homenaje cualquier día de verano, porque si quieres saber a qué sabe Cantabria, aquí tienes la respuesta.