Cultura

Una fiesta con siglos de historia en Castilla-La Mancha, finalista al premio de National Geographic como Mejor Patrimonio Cultural

Cencerros, danzantas y procesiones protagonizan esta fiesta milenaria en honor a la Virgen de la Candelaria y San Blas

festividad de La Endiablada
festividad de La EndiabladaBlog de fotografía de viajes

La Endiablada, una de las tradiciones más emblemáticas de Castilla-La Mancha, ha sido seleccionada por National Geographic como candidata al premio '+ Historia' en la categoría de Mejor Patrimonio Cultural. Esta celebración ancestral, que tiene lugar cada mes de febrero en el pequeño municipio conquense de Almonacid del Marquesado, ha captado la atención de la prestigiosa revista por su singularidad, fuerza simbólica y arraigo popular.

Reconocida Bien de Interés Cultural en 2020, La Endiablada es una de esas fiestas cuyo origen se pierde en el tiempo. Tal y como recuerda National Geographic, "ha resultado imposible datar" con precisión el inicio de esta manifestación festiva y religiosa que cada año convierte a este pueblo de poco más de 400 habitantes en escenario de una celebración única en España.

Durante cinco días, a partir del 1 de febrero, las calles se llenan de color, ruido y fervor gracias a la participación de cerca de un centenar de hombres conocidos como diablos. Estos personajes desfilan ataviados con blusa y pantalón de tela floreada en tonos vivos y portan a la cintura enormes cencerros -algunos de hasta 45 centímetros-que hacen retumbar cada rincón del municipio.

Además de los cencerros, los diablos llevan una porra tallada con figuras y lucen diferentes tocados: un gorro floral cilíndrico durante el día de la Candelaria y una mitra obispal el de San Blas.

Danzantas, procesiones y rituales que emocionan

Pero los diablos no son los únicos protagonistas. También lo son las danzantas, un grupo de ocho mujeres que desempeñan un papel central en las festividades. Uno de los momentos más emotivos se produce cuando estas mujeres recitan los tradicionales dichos a la Virgen de la Candelaria y a San Blas tras la misa.

Las procesiones de los santos también forman parte esencial de la festividad. A lo largo del recorrido, vecinos y visitantes acompañan las imágenes con bailes, saltos y expresiones de devoción.

En la carrera por el reconocimiento nacional

La inclusión de La Endiablada en los premios + Historia de National Geographic supone un reconocimiento al valor cultural de esta manifestación popular. Compite en la categoría de Mejor Patrimonio Cultural con otras celebraciones españolas de gran tradición: el Día de la Faldeta (Fraga, Huesca), la Fiesta de la Arribada (Baiona, Pontevedra), los Raiers (Pobla del Segur, Lérida) y el evento De la Luna al Fuego (Zafra, Badajoz).

Las votaciones estarán abiertas hasta el próximo 12 de octubre y podrán participar en ellas tanto los lectores como los seguidores de National Geographic a través de sus canales oficiales. Los resultados se publicarán en la edición de diciembre de la revista Historia National Geographic.