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Segovia responde a la llamada masiva para vacunarse con AstraZeneca

Cerca de un millar de segovianos de entre 60 y 65 años recibirán este Jueves Santo la primera dosis

Vacunación frente a la Covid-19 de los docentes y del resto del personal que trabaja en los centros educativos de Segovia, EFE / Pablo Martín
Vacunación frente a la Covid-19 de los docentes y del resto del personal que trabaja en los centros educativos de Segovia, EFE / Pablo MartínPABLO MARTINEFE

Segovia responde a la llamada masiva para vacunarse contra la covid con las dosis de Astrazeneca de remanentes de otros grupos y de las nuevas que están llegando. Y es que cerca de un millar de vecinos de la capital de Acueducto de entre 60 y 65 años recibirán este Jueves Santo su primera dosis de esta vacuna contra el coronavirus en las instalaciones del pabellón Pedro Delgado de Segovia, en la primera jornada en Castilla y León de una campaña a la que están llamadas personas que no pertenecen a ningún grupo prioritario.

La nueva campaña de vacunación en Castilla y León fue anunciada ayer miércoles, después de que el Ministerio de Sanidad comunicase que a finales de esta semana haría un nuevo envío de las vacunas a las comunidades autónomas, por lo que el llamamiento se ha realizado en apenas un día, por redes sociales y medios de comunicación.

“Ha sido un poco locura organizarlo todo en tan poco tiempo, pero bueno, está saliendo bien y además la población esta respondiendo y eso es lo importante”, señala la enfermera que resolvía las dudas de los vecinos en la cola, Judit de Santos, una de las responsables del equipo de vacunación, en declaraciones recogidas por Efe.

Para la sanitaria la difusión del llamamiento masivo ha sido un éxito, también para los más mayores: “Al final, los familiares les acaban informando de alguna manera, siempre están los hijos ‘al quite’ para verlo y avisar a sus padres”, relata.

Otra de las responsables, la enfermera Carolina García, asegura que este primer día está saliendo “perfecto” porque los vecinos que se acercan apenas están esperando unos veinte minutos para recibir su dosis, lo que “no está nada mal”. Además, apunta que no ha percibido mucha preocupación por parte de los llamados este jueves sobre la vacuna AstraZeneca-Universidad de Oxford a pesar de las noticias en los últimos meses sobre posibles efectos adversos como la aparición de trombos, que llevaron a paralizar la aplicación de esta vacuna en todo el país temporalmente.

Para María Ángeles Muñoz, de 65 años, la clave es “no pensarlo”: “Vengo con un poco de miedo, porque me da un poco de respeto esto de la vacuna, yo no me vacuno ni de la gripe, así que he hecho un poquito de esfuerzo”, ha relatado a Efe a su salida del pabellón, tras haber recibido la dosis

Martín Cruz, de “64 años para 65”, espera en la cola su turno, un día después de enterarse por la prensa local y gracias a la difusión de la noticia por parte de sus familiares de que tenía la oportunidad de recibir la dosis “a ver si se acaba todo esto”, confía. En su opinión, parte de la culpa del miedo que tiene la gente es por la difusión, en su opinión excesiva, de las malas noticias: “Si no se hubiera radiado todo con pelos y señales desde el primer segundo, probablemente la gente estaría menos alerta”, afirma, mientras asegura tener confianza en las agencias sanitarias.

Otro buen ejemplo de colaboración a pesar de todo es el de Ángeles Mazarías, que cumplió 65 años hace dos días y, a pesar de que sufrió un derrame hace siete años, no ha tenido miedo de recibir esta vacuna, porque tiene una sola idea en mente: “Venimos a que todo se acabe”.