Rugby

Gana el VRAC, cae El Salvador

El conjunto quesero cumple en Burgos y asegura la segunda plaza

Jeremy Trevithick intenta zafarse de un placaje, en el encuentro disputado este domingo entre SilverStorm El Salvador y Lexus Alcobendas en Pepe Rojo.
Jeremy Trevithick intenta zafarse de un placaje, en el encuentro disputado este domingo entre SilverStorm El Salvador y Lexus Alcobendas en Pepe Rojo.J. L. Useros

Jornada de cal y arena. El Quesos Entrepinares se impuso en Burgos y consolidó su segunda plaza por 26-34, mientras que el SilverStorm El Salvador cayó derrotado 10-27 ante el Lexus Alcobendas.

El VRAC Quesos Entrepinares cerró con solvencia la fase regular de la División de Honor, si bien durante los últimos minutos tuvo que esforzarse para frenar el ímpetu de un Universidad de Burgos – Bajo Cero que fue de menos a más, todo lo contrario que los azulones, que empezaron el duelo lanzados y acabaron con problemas derivados, especialmente, de las lesiones y los contratiempos, un habitual en el presente curso en el VRAC.

En el minuto 35, al borde del descanso, el resultado era de 0-27, lo cual ponía de manifiesto el fulgurante comiendo de partido que había completado el equipo de Diego Merino, con una lluvia de ensayos que encarriló la victoria y proporcionó el colchón que, a la postre, significaría el triunfo y los cuatro puntos. El primer ensayo llegó por medio de Pablo Miejimolle tras una melé en veintidós que el Quesos no perdonó. Encontró la transformación de Baltazar Taibo, intratable con el pie (0-7). Corría el minuto cinco y la marca del malagueño abría la lluvia de puntos a favor de los queseros. Después vendría la de Tomás Carrió en el minuto 12 tras una larguísima carrera en la que decidió la velocidad del argentino. Taibo pasaba la transformación y un puntapié a mayores que abría brecha en el marcador (0-17). Los mínimos acercamientos locales los apagaba con facilidad. Así, en el minuto 23 repetiría Carrió al encontrar un hueco en la defensa y de nuevo Baltazar Taibo acertaba entre palos para el 0-24. Poco después, un nuevo castigo y otros tres puntos (0-27). Incluso llegó a solventar el Quesos una doble inferioridad numérica por las amarillas a Coque Ortiz y John Wessel-Bell, jugando varios minutos con 13 jugadores.

La reacción de Aparejadores llegaría antes del descanso y con la firma de Cronje. Alentados por su afición, los burgaleses dieron un paso adelante y sumaron sus siete primeros puntos del partido, transformación de Weersma incluida. Así se llegó al intermedio, con un clarividente 7-27 que hacía intuir una segunda parte plácida para el Quesos Entrepinares. Pero nada más lejos de la realidad. Burgos reaccionó a los 10 minutos de la reanudación con un ensayo de Snyman (12-27) que contrarrestaba Pedro de la Lastra finalizando una jugada sobre la línea lateral izquierda (12-34). Con más de 20 puntos de ventaja llegaría el partido a sus últimos 10 minutos, cuando Aparejadores se desató y, en cuestión de dos minutos, dejaba el partido a dos jugadas para remontar. Primero ensayó Snyman y después Beltramino, ambos en acciones de siete puntos, y el marcador reflejaba un 26-34 con Burgos en su mejor momento y el VRAC en el peor. Por suerte, el Quesos apagó el incendio y el pitido final de David Castro puso en valor la gran primera parte de los vallisoletanos y una nueva victoria que garantiza el segundo puesto en la fase regular. El partido dejó el debut del recién llegado Federico Ezequiel Fontana.

Derrota colegial

Mientras, los colegiales en su partido como local plantearon una buena defensa en los primeros ataques granates, aguantando las acometidas y sabiendo frenar tapando los huecos. Se recuperó el oval, fruto de algunos errores visitantes, pero en una de estas jugadas se acaba cometiendo golpe centrado que pasa certero López para poner el 0-3.

No se arredraron los vallisoletanos, que continuaron con el buen trabajo defensivo, evitando que Alcobendas tuviese fluidez, y comenzando a construir en ataque, partiendo de una gran patada de Cilliers. Un ataque con peligro por el ala derecha acabaría en golpe de castigo centrado que el apertura sudafricano pasó para empatar.

En inferioridad por un sin bin a Rust poco después de la anotación, SilverStorm El Salvador supo aguantar bien en defensa, llevando además peligro sobre campo madrileño en varias acciones. Se quedó a escasos metros de llegar el ensayo en un par de jugadas, teniendo que volver a aplicarse a fondo en defensa.

Sí conseguía el premio Lexus Alcobendas, con una jugada de pick and go sobre la línea de marca local, en la que el medio de melé Perotti acabó encontrando un resquicio por el que colarse en el entramado defensivo colegial, consiguiendo justo antes del pitido del colegiado un ensayo psicológico que situaba el 3-10.

Desde el primer momento de la reanudación lo intentaron los locales, con un fugaz ataque de Rust, pero, lejos de conseguir puntos, en una desafortunada acción contra la defensa granate, De la Llana vería la tarjeta roja al impactar contra la cabeza de un rival, quedándose en inferioridad SilverStorm El Salvador el resto del partido.

Ni siquiera en esta circunstancia dejaron de intentarlo los colegiales, pero el equipo de Inchausti consiguió ganar metros conforme pasaban los minutos, hasta encontrar espacio en la derecha, donde Van den Bergh conseguía posar el oval, fallando López la transformación en el minuto 50.

Volvían los intentos por el ala derecha de SilverStorm El Salvador con peligro a la 22 granate, pero no conseguían traducirse en puntos. Se quedarían temporalmente los visitantes con 14, por sin bin de Domínguez, pero pese a ello ampliaban su ventaja con una rápida transición que culminaba Stewart en el minuto 59.

Con el partido acercándose al final, Lexus Alcobendas hilaba una buena jugada desde un saque lateral, que servía para que Tapili acabase posando el oval en zona de marca, poniendo, esta vez con transformación de López, el 3-27 en el marcador.

Lo intento SilverStorm El Salvador hasta el último instante, presionando de nuevo sobre la 22 granate, pero la defensa del líder de la División de Honor neutralizaba los intentos colegiales. Una gran carrera de Lainz propició una jugada a pocos metros de la zona de marca, que Del Hoyo convertía en el último instante en ensayo, pasado por Cilliers, para poner el definitivo 10-27.