Sociedad

Impulso a la empleabilidad de las personas con enfermedad mental en Ávila

Faema contratará a ocho personas paradas para prestar servicios de interés general y social en la provincia gracias a una subvención de la Junta

La Consejería de Industria, Comercio y Empleo convoca tres programas para mejorar las condiciones de seguridad y salud en los centros de trabajo
La Consejería de Industria, Comercio y Empleo convoca tres programas para mejorar las condiciones de seguridad y salud en los centros de trabajoEl PuenteLa Razón

“Apostamos por el empleo” es el nombre del proyecto que la Asociación de Familiares, Amigos y Personas con Discapacidad por Enfermedad Mental de Ávila (Faema) va a poder poner en marcha gracias a la financiación de los costes salariales de las personas contratadas para la prestación de servicios de interés general y social por parte del Gobierno autonómico.

Una línea de ayuda que, entre otras cosas, facilita la adquisición, por los trabajadores contratados, de una experiencia profesional que les permita acceder al mercado laboral de una manera estable.

“Las personas que contratamos a través de estos programas suelen continuar en la entidad porque somos capaces de fomentar el empleo a través de la atención a las personas” señala Inma Pose, Directora General de Faema.

En esta ocasión la subvención irá destinada a la contratación de ocho personas, siete asistentes personales o monitores y un técnico de inserción laboral. Todas a jornada completa y con una duración de seis meses.

Por un lado, la técnico de inserción laboral reforzará nuestro compromiso en el empleo y su función principal será apoyar en la búsqueda activa de empleo, ayudar en la elaboración de currículums de personas vulnerables, conocimiento de herramientas tecnológicas para encontrar un empleo y contacto con el sector empresarial. Atenderá tanto en Ávila como a personas desempleadas de la provincia.

Por otra parte, los asistentes personales trabajarán cuatro de ellos en Ávila y tres en el medio rural, concretamente en las localidades de La Adrada para apoyar el centro multiservicios de reciente apertura y en Sotillo de la Adrada, también en Burgohondo donde Faema desarrolla un programa de apoyo en el domicilio con las personas mayores y en el municipio de Solosancho y sus anejos donde se llevarán a cabo diferentes talleres.

En cada lugar el programa se adapta a las necesidades de cada zona y de los destinatarios.

“Es muy positivo que en el medio rural se ha conseguido contratar a personas de la zona”, apunta Pose, quien destaca que gracias a esta subvención también será posible que las personas mayores puedan participar en actividades que mejorarán su calidad de vida y se combatirá la soledad no deseada”.

Se realizarán actuaciones tanto grupales como individuales y en los domicilios de las personas destinatarias del proyecto.

Los objetivos principales del proyecto son fomentar la autonomía personal de las personas mayores o personas con discapacidad o en situación de dependencia, así como el desarrollo de las actividades básicas de la vida diaria en su entorno habitual.

Por otra parte, se crea empleo y se combate la soledad de las personas más vulnerables, además de asesorarles en cuanto prestaciones sociales o recursos que puedan necesitar.

Las actividades grupales se llevarán a cabo en espacios cedidos por los ayuntamientos participantes. Consistirán en talleres de terapia cognitiva, actividad física y deporte, paseos, taller de nuevas tecnologías a través de la Tablet, musicoterapia, taller de hábitos saludables, manualidades, entre otras.

Este programa durará hasta junio del 2023 lo que permitirá dar apoyo a 150 beneficiarios de forma directa.

“Es un lujo poder cerrar así el año y comenzar el 2023 creando empleo”, señala Pose.

Por otra parte, José Francisco Hernández, delegado Territorial de la Junta, reafirma el compromiso de la Junta con las personas más vulnerables o con más necesidades de apoyo, como son las personas con discapacidad y las personas mayores. “Queremos trabajar para que las personas puedan desarrollar su plan de vida en su entorno, puedan permanecer en sus domicilios rodeados de sus vecinos y ellos puedan tomar sus propias decisiones”, afirma.

Hernández pone en valor también que este proyecto dinamiza y fomenta la inserción laboral entre personas desempleadas y ofrecerá una atención especializada en personas que necesitan atención.

Actualmente, Faema cuenta con una plantilla de 140 trabajadores, de los cuales 33 están en su centro especial de empleo y más del 70 por ciento son personas con discapacidad.

Con las nuevas contrataciones Faema tendrá en plantilla casi de 150 trabajadores, lo que nos llena de satisfacción.