Congreso

García-Gallardo defiende una política energética basada en la ciencia y sin ideología

El vicepresidente advierte de la «hipocresía verde» y pide a Sánchez que revise su decisión de aparcar la energía nuclear

García-Gallardo y Veganzones, antes de clausurar el I Congreso ENIOA
García-Gallardo y Veganzones, antes de clausurar el I Congreso ENIOAEduardo MargaretoIcal

El Museo Patio Herreriano de Valladolid ha acogido este jueves el I Congreso ENIOA que reunía a un centenar de asistentes, la mayoría profesionales y expertos, para hablar de la energía nuclear y otras alternativas energéticas.

Un cónclave que clausuraba el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, mostraba su preocupación por la dependencia energética de España y apostaba por una política en este ámbito basada en los conocimientos científicosy no en la ideología de ningún ministro ni partido político, como cree que ocurre ahora con el PSOE, y su afán por erradicar las centrales nucleares del país, como ha ocurrido con la burgalesa de Santa María de Garoña, que dejó de funcionar hace una década y ha iniciado ya su proceso de desmantelamiento definitivo.

El número dos del Gobierno regional defendía las bondades de la energía nuclear, que considera «segura, barata, limpia y abundante para la industria», y criticaba la «hipocresía verde» que, en su opinión impera en la izquierda de este país. Además, defendía un mix energético que cuente con este tipo de energía con criterios de tecnología, ingeniería y ciencia en consonancia al resto de países de la Europa de la Unión, por lo que pedía a Sánchez que revise su decisión de aparcar la nuclear «para no condenar aún más a España» en materia energética.

«El coste de la energía es un factor de competitividad esencial para la industria y, por tanto, para el desarrollo económico y social de la Comunidad», decía García-Gallardo, quien, pese a su apuesta por la nuclear, defendía también la fortaleza de Castilla y León en energías renovables, por las que hay que seguir apostando hasta salir de la cola de Europa en independencia energética hasta conseguir la soberanía y asegurar las cadenas de suministro.

Además del caso de Garoña, el vicepresidente se refería a lo ocurrido con la mina de uranio de la localidad salmantina de Retortillo, que preveía un gran proyecto que iba a dar más de medio millar de empleos a la zona así como a abastecer de este mineral a las centrales nucleares aún operativas en nuestro país durante más de diez años.

Durante el Congreso, que ha supuesto una oportunidad única para intercambiar experiencias y adquirir conocimientos sobre las últimas tendencias en el sector de la energía, se ponía en valor también la contribución y los desafíos de la energía eólica, además del potencial del hidrógeno verde y la biomasa como principal vector de descarbonización.