Sociedad

Las niñas ya pueden ser Pueri Cantores de la Catedral de Burgos tras siglos de solo niños

La entidad a un paso hacia la igualdad y se convierte en un coro infantil mixto, aunque el tradicional Obispillo seguriá siendo un niño

La Escolanía Pueri Cantores durante un concierto de Navidad
La Escolanía Pueri Cantores durante un concierto de Navidad Ricardo OrdoñezIcal

La Escolanía de Pueri Cantores de la Catedral de Burgos, que durante seis siglos ha estado solo formada por niños, da un paso hacia la igualdad y se convierte en un coro infantil mixto, con la entrada de niñas, lo que sin embargo no se traducirá en cambios en el tradicional Obispillo, que se celebra cada 28 de diciembre y que seguirá protagonizado por un niño.

"No contemplamos la posibilidad de que el Obispillo sea una niña", asegura Amador Pérez, el director de la Escolanía, en referencia a ese niño vestido de obispo que el Día de los Santos Inocentes recorre las calles de Burgos a lomos de un caballo blanco y, desde el balcón de la Casa Consistorial, hace su petición anual a la ciudad en nombre de todos los niños.

Es una tradición y, de momento, prefieren no cambiarla. Lo que sí tenían claro hace tiempo es que había que abrir los Pueri Cantores a niñas, porque eran la única escolanía de las federadas sin niñas, ya que hasta el Misteri d'Elx, con una escolanía mayor de voces masculinas, tiene coros infantil y juvenil mixtos.

"Al final tienes que dar un salto, ya no de cantidad sino de calidad, y adaptar la Escolanía a su tiempo", ha indicado Pérez, quien ha recordado que el primer escrito que recoge la existencia de los Pueri Cantores, de unos "niños del coro" es del siglo XV y ahora estamos ya en el siglo XXI.

Pérez ha explicado que así se lo propusieron -él mismo y sus compañeras Nerea Cuadrado y Tania Ortega- al Cabildo de la Catedral de Burgos: "es una suma, una suma de voces, una suma de padres, una suma de impulsos y una suma de intenciones. Queremos hacer una escolanía inclusiva", ha insistido.

Dos primeras incorporaciones y una en dudas

La apertura de los Pueri Cantores a niñas se materializará en esta nueva temporada que acaba de arrancar y, por el momento, ya cuentan con dos voces femeninas, una de ellas, la hermana de uno de los escolanos, "que tenía muchas ganas de entrar". Y hay una tercera en dudas.

Las nuevas incorporaciones, tanto de niñas como de niños, no se convertirán en escolanos hasta el 28 de diciembre, el día del Obispillo, cuando se les imponga la cruz de madera y la túnica, de modo que "el punto de inflexión" será el tercer domingo de enero, cuando el coro al completo actúe en la misa de la Catedral.

"Habremos pasado de tener solo niños a niños y niñas, y será curioso y bonito. Sobre todo para los que asisten habitualmente a la misa en la capilla de Santa Tecla", comenta Pérez, quien espera desde gestos de sorpresa a otros de asentimiento pues siempre ha habido gente que pregunta por qué no había niñas.

Atendiendo a un proyecto musical

El director de la Escolanía ha indicado que la única limitación es que no haya nunca más niñas que niños y es una exigencia propia, atendiendo a criterios exclusivamente musicales: "ambas son voz blanca pero el timbre del niño es mucho más dulce que el de la niña", apunta.

Y espera que, a medida que se conozca la novedad, reciban peticiones de entrada para un coro infantil que actualmente cuenta con 17 niños (más las dos niñas), y que se complementa con el coro juvenil que arrancó hace unos años, con una veintena de voces, tanto masculinas como femeninas.

Ha sido precisamente ese coro juvenil el que, sin pretenderlo, ha servido de periodo de adaptación para que los escolanos se acostumbren a cantar con niñas.

Ahí han compartido escenario con chicas de 13, 14 y 15 años, ha indicado Pérez, y es otro de los éxitos de un coro juvenil que garantiza la continuidad musical de los escolanos cuando dejan de ser "pueri", para que no se desvinculen de la música ni del mundo de la coral