Patrimonio

El puente único en el mundo que levanta un espectacular pueblo medieval

Su entorno de cuento de hadas bien merece la pena una visita para acabar el verano

La localidad burgalesa de Puentedey
La localidad burgalesa de PuentedeySodeburSodebur

Llega el final del verano, y cada vez son menos los días libres para disfrutar de una experiencia única, para cerrar un periodo de descanso. Muchos son los rincones que existen en nuestro país, pero hay uno que es ideal para esta época del año, por su climatología, más que suave, y por su espectacularidad. Pero es que además este bello rincón es un lugar especial y único en el mundo, ya que se trata de un precioso pueblo medieval que se sujeta en un impresionante puente de piedra.

Se trata de una característica villa medieval, que cuenta con una forma urbana característica: compacta, amurallada, y con una vivienda típica, la casa gótica. La ciudad medieval aparece como lugar cerrado dentro del paisaje agrícola y forestal, sirviendo de fortaleza defensiva y refugio de los habitantes y campesinos del entorno, a la vez que constituye el mercado del área de influencia.

Estas ciudades se desarrollaron con la expansión agrícola iniciada en el siglo XII que generó prosperidad económica y favoreció los intercambios comerciales que se realizaban en núcleos urbanos ya existentes, aunque despoblados desde el fin del Imperio Romano. Estos intercambios también se llevaban a cabo en los castillos y en los monasterios del feudo.

Las villas solían tener una población considerable y una actividad económica importante, a menudo centrada en el comercio y la producción artesanal. Muchas de ellas estaban amuralladas o protegidas por un castillo, lo que demostraba su importancia estratégica y defensiva. Contaban con calles empedradas, plazas y edificios públicos como la casa consistorial (aunque un ayuntamiento propio no siempre era exclusivo de una villa). Eran lugares de encuentro y vida comunitaria, con edificios como el palacio de justicia o la casa de la villa.

Puentedey

Pues el único pueblo en el mundo de estas características que sustenta un puente de piedra se encuentra en la provincia de Burgos, y se llama Puentedey, que en 2022 fue reconocido oficialmente como “El pueblo más bonito de España”. Su nombre ya lo dice todo: “El puente de Dios”. Y no es un recurso poético, sino la mejor manera de describir su gran tesoro natural, un puente de roca esculpido por el río Nela durante millones de años, sobre el que se levanta el casco histórico del pueblo. Un escenario tan singular que no existe nada igual en el mundo.

Visitar Puentedey es como hacer un viaje en el tiempo a varios siglos de atrás. El enorme arco de piedra natural sobre el río Nela es su principal emblema. Por ambas orillas discurre un sendero que permite observar esta obra de arte de la naturaleza en todo su esplendor. Este pequeño pueblo de apenas 50 habitantes se ha convertido en una visita obligada, y su espectacularidad y al ser un punto de partida de algunas de las mejores rutas senderistas de España.

No se sabe con certeza los orígenes de Puentedey, pero sí que aparece nombrada por primera vez en el Becerro de las Behetrías, durante la baja Edad Media, en el siglo XIV. Por entonces pertenecía a la Merindad de Aguilar de Campoo, a diferencia del resto de Las Merindades que formaban parte de Castilla la Vieja.

Ya en el siglo XVIII aparece la Junta de Puentedey, formando parte del partido de Castilla la Vieja en Laredo. Además de Puentedey, formaban parte de ella las localidades de Quintanabaldo y Brizuela. La titularidad del señorío pertenecía a Don Antonio María de Porres, quien nombraba al alcalde que debía ser de Puentedey. Los integrantes de la junta se reunían al abrigo de la Cueva del Santo, hasta la segunda década del siglo XX. Pocos años antes la localidad se integró en la Merindad de Valdeporres, a la cual sigue perteneciendo hoy en día.

Principales atractivos

Además, del puente de piedra, que es el emblema de la villa, el pueblo burgalés cuenta con otros atractivos monumentales, entre los que destaca:

Iglesia de San Pelayo

Un templo románico de una única nave. Su decoración con motivos ajedrezados, rombos y tallos de hojas, así como su sencilla portada decorada con al representación de un hombre que lucha con una espada y un escudo contra lo que parece una serpiente son sus elementos más destacados. Se trata de una fortificación levantada entre los siglos XV y XVI en el punto más alto del puente que da nombre al pueblo. Este palacio fue declarado Bien de Interés Cultural en 1949.

Casco Histórico

Casas solariegas y construcciones populares forman un casco urbano que revela un pasado histórico medieval que han marcado una personalidad propia que merece la pena conocer. De hecho, los vestigios de sus antiguas murallas quizá revelen que situarse sobre el puente, a quince metros por encima del río, tenía una intención defensiva.

Línea de Ferrocarril

La Línea de Ferrocarril Santander Mediterráneo cruza Puentedey en sentido noroeste sureste, lo que hace que presenta elementos de patrimonio histórico industrial como puentes y túneles. En la actualidad la línea, clausurada en el año 1985, se ha convertido en la Vía Verde F.C. Santander-Mediterráneo.

Monumentos naturales

El entorno natural que lo rodea ha conseguido cautivar ya a miles de visitantes. Situado en una de las zonas más fascinantes de España, este pueblo ofrece un acceso privilegiado a un paisaje de formaciones geológicas impresionantes. También está la cueva de Pozalagua, famosa por sus impresionantes estalactitas excéntricas, que desafían las leyes de la gravedad al crecer en direcciones aparentemente imposibles.

El Mirador de San Andrés

Ofrece la mejor panorámica de la parte trasera de Puentedey, con el caserío al filo del precipicio y la iglesia y el castillo en posición privilegiada. La pasarela ha sido construida con una estructura metálica que permite ver el vacío bajo nuestros pies, por lo que no es apto para personas con vértigo. A sus pies discurre la Vía Verde del Santander-Mediterráneo, un camino natural que sigue el trazado del ferrocarril que pretendía conectar el Mediterráneo con el Cantábrico pero nunca llegó a ver la luz.

Cascada de La Mea

El visitante no puede abandonar Puentedey sin visitar la cercana Cascada de La Mea, ubicada a poco más de un kilómetro del casco histórico. Se trata de un estrecho cañón encajonado entre altas paredes rocosas, por el que discurre el agua proveniente de los Canales de Dulla. Con el tiempo el agua ha erosionado la roca, dando lugar a un cortado por el que se precipita el agua a más de 30 metros de altura.

Ojo Guareña

Muy cerca de Puentedey se encuentra el Complejo Kárstico de Ojo Guareña, que con sus casi 100 kilómetros de desarrollo, el conjunto de cuevas más extenso de la Península Ibérica y uno de los 10 más grandes del mundo. La presencia de diversos niveles, algunos de los cuales están fosilizados y otros son hidrológicamente activos, dotan a esta zona del Complejo de un extraordinario interés morfológico, hidrológico, científico y didáctico. En su interior se han encontrado varios santuarios prehistóricos y 63 especies de invertebrados cavernícolas, de las cuales cuatro son exclusivos de estas cuevas.

El paisaje, de calidad única, se caracteriza por su relieve de cuestas formando un cejo calizo, que divide dos regiones biogeográficas bien diferenciadas, la Región Eurosiberiana y la Región Mediterránea. En la primera se corresponde con la zona norte donde se encuentran los Montes de Somo lugar de nacimiento de los ríos y arroyos que atravesando el verde valle han llegado hasta el cejo calizo y han formado la mayor red de cavidades conocida en España y una de las más importantes de Europa y del mundo, el Complejo Kárstico de Ojo Guareña.

Los ríos Guareña y Trema se sumen en sumideros para luego circular por el interior de las galerías formando un laberinto de cuevas y resurgir al exterior kilómetros más abajo. En la zona sur o región Mediterránea nos encontramos con valles pequeños dedicados al cultivo de cereal, pastizales artificiales, patatales, etc.

La fauna en este espacio presenta gran diversidad de especies, de las que destacamos las aves nidificantes que aprovechan los cantiles rocosos, como el águila real, el alimoche y los buitres leonados, también otras aves forestales como el azor, el gavilán, el halcón peregrino, el águila culebrera, o las rapaces nocturnas como el cárabo o el búho real.

Los mamíferos también están presentes en este espacio como el desmán de los pirineos, el lirón careto, la marta, la gineta, el gato montes, el jabalí, el corzo y la presencia puntual del lobo. Los murciélagos utilizan las cuevas como área de cría, refugio invernal o área de reposo. La fauna más importante la encontramos en el interior de la Cuevas de Ojo Guareña, que hasta la fecha se han descubierto 115 especies, y publicado 16 especies endémicas de Ojo Guareña.

Red de Senderos

El espacio Natural está recorrido por una extensa red de senderos de diferente dificultad, en esta ficha te indicamos cinco rutas no obstante, en la sección "De Senderos" podrás disponer de todos los recorridos.