Finalizada una nueva edición de la Escuela del Gobierno del PSOE en Castilla y León, que se ha venido celebrando durante los dos últimos días en Salamanca, y donde el secretario general de la Comunidad, Luis Tudanca, ha insistido en que ya es el momento de un Gobierno del PSOE en la Región, con el fin de gobernar desde «la humildad, la decencia y el diálogo». «Con esta celebración se da un paso más para que Castilla y León tenga el gobierno que se merece».

El líder socialista también ha reconocido que «resistir es una forma de alegría», y que «hemos resistido una vez más», a la vez que ha hecho una reflexión con el fin de «proteger una manera diferente de hacer política», frente a la del odio y la crispación de la derecha y la extrema derecha.

En este sentido ha manifestado que el de Castilla y León fue el primer gobierno que metió a la «extrema derecha» en una coalición e identificó dos culpables: Feijóo y Mañueco. «Ya lo advertí. Dije que iban a acabar deshumanizando al adversario, alimentando el odio y banalizando el mal. Han censurado obras de teatro, han declarado BIC monumentos franquistas, han despreciado a mujeres, personas discapacitadas, y hasta nos pusieron una querella por poner la bandera LGTBI en las Cortes. Ponernos las que queráis que seguiremos defendiendo sus derechos», proclamó.

Por otro lado, Tudanca se refirió a los agricultores y ganaderos para poner en valor el apoyo del Gobierno, con 300 millones de euros, frente a los 40 repartidos por la Junta de Castilla y León, a pesar de tener las competencias exclusivas en esta materia. «Esta Comunidad no tiene futuro si los territorios no lo tienen. Hace falta desarrollo, industria, infraestructuras, y la esperanza de tener un futuro mejor. Queremos una Castilla y León que esté gobernada de otra manera, desde la decencia», ha finalizado su intervención.

Más intervenciones

Mientras, la número dos en las listas del PSOE al Parlamento Europeo, Iratxe García, ha apelado al «liderazgo y valentía» de los socialdemócratas, que preside a nivel continental, porque, según reclamación, son «más necesarios que nunca» para frenar «la ola reaccionaria que avanza en toda Europa». Una «extrema derecha» en la que ubicó al PP y a Vox y que, según denunció, «repudia los avances logrados, teme el futuro y quiere volver a un pasado glorioso que nunca existió como tal».

También intervino, aunque por vídeconferencia, el presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, quien ha invitado a los socialistas a demostrar que «se puede ganar sin insultar» y contrapuso «el odio y el miedo» que atribuyó a «los extremistas», frente a la «esperanza» del socialismo que, «a corto plazo quizá no tenga tantos efectos electorales, pero a largo plazo es mucho mejor».