Cataluña

Esquerra presiona a JxCat tras su acuerdo con la CUP para investir a Aragonès

Los republicanos mantienen contactos con el partido de Puigdemont y tratan de apurar las últimas horas para lograr su apoyo

Cuando faltan menos de 24 horas para el primer debate de investidura, Esquerra sigue sin arrojar la toalla. “Todavía estamos a tiempo”, ha asegurado esta mañana la portavoz de ERC, Marta Vilalta, palabras con las que ha tratado de generar un resquicio de esperanza sobre la posibilidad de investir mañana a Pere Aragonès como president de la Genelitat. Si bien, nada hace pensar que pueda haber un cambio de última hora pese a que los republicanos cuenten ahora con la fuerza de un acuerdo bajo el brazo con la CUP para presionar a JxCat. El partido de Carles Puigdemont reúne esta tarde a la dirección para tomar la decisión definitiva.

Vilalta se ha limitado a decir que a lo largo de la jornada de hoy hay contactos, pero ha evitado confirmar que pueda haber una reunión entre ambas partes que dé pie al desbloqueo de las negociaciones y JxCat se avenga a apoyar la investidura de Aragonès. La portavoz republicana ha puesto en valor el acuerdo con la CUP y ha pedido “seguir trabajando las horas que quedan” para trabar un pacto. “El acuerdo lo vemos todavía posible”, ha afirmado Vilalta, quien considera que no hay diferencias “insalvables” en las posturas.

En las últimas horas han habido intentos por parte de Esquerra para seducir a JxCat (como una propuesta para reformular el Consell per la República, principal escollo de las negociaciones), pero ambas partes siguen lejos de acercar posturas y, además, el acuerdo entre ERC y la CUP puede convertirse en un arma de doble filo. Por un lado, los republicanos se aseguran los nueve votos de los anticapitalistas, pero los cuperos también han advertido que ese pacto queda blindado y JxCat tiene que asumirlo.

Esta circunstancia limita aún más la posibilidad de acuerdo a tres. Y es que las medidas sociales y económicas pactadas entre Esquerra y CUP tienen difícil encaje entre algunos sectores de JxCat.

En este contexto, Aragonès tiene ahora 42 apoyos garantizados -Esquerra (33) y CUP (9)-, pero necesita los 32 de JxCat. Si el presidenciable no es investido mañana, como todo indica, tendrá una nueva oportunidad el domingo o el martes -cuando fije Laura Borràs el segundo pleno-. Si tampoco sale adelante ese intento, se abrirá un periodo de dos meses en Cataluña para elegir a un candidato y evitar una repetición electoral.