Restricciones

El ocio nocturno catalán reclama a la Generalitat seguir los pasos de Ayuso

La patronal pide al nuevo ejecutivo catalán que lleve a la Audiencia Nacional las medidas impuestas por el gobierno central

GRAF2752. SITGES (BARCELONA), 20/05/2021.- Catorce meses después de que se declarara el estado de alarma y se cerrase el ocio nocturno por la pandemia, Sitges celebró esta noche un ensayo clínico en el que cerca de 400 voluntarios disfrutaron de nuevo de bares nocturnos sin la necesidad de guardar distancia social aunque con mascarilla, uso de gel hidroalcohólico y tras haberse sometido a una prueba rápida de antígenos. EFE/Alejandro García
GRAF2752. SITGES (BARCELONA), 20/05/2021.- Catorce meses después de que se declarara el estado de alarma y se cerrase el ocio nocturno por la pandemia, Sitges celebró esta noche un ensayo clínico en el que cerca de 400 voluntarios disfrutaron de nuevo de bares nocturnos sin la necesidad de guardar distancia social aunque con mascarilla, uso de gel hidroalcohólico y tras haberse sometido a una prueba rápida de antígenos. EFE/Alejandro GarcíaAlejandro GarciaEFE

Desde el inicio de la pandemia ha existido un sector que no ha tenido la mínima posibilidad de volver a operar ni estar cerca de ello. Tras más de un año en el dique seco, la desesperación del sector está llegando a límites que nadie podría haber imaginado hace apenas poco más de un año. Por este mismo motivo, la patronal del ocio nocturno de Cataluña -FECASARM- lleva batallando contra todas las administraciones posibles para poder, aunque sea probar, volver a levantar la persiana.

Aunque durante el verano de 2020 los restauradores nocturnos consiguieron algunas victorias judiciales contra el gobierno de hasta entonces Joaquim Torra, como la posibilidad de abrir algunos locales hasta la 1, discotecas y locales nocturnos no han podido abrir con cierta normalidad nunca. Distintos motivos se han ido dando desde los gobernantes pero ninguno plenamente convincente para un sector que no entiende porque, aunque con ciertas restricciones, el resto puede abrir menos ellos.

En las últimas horas la situación del sector ha dado un vuelco gracias a la Comunidad de Madrid. El consejo interterritorial de Sanidad aprobó la semana pasada nuevas medidas restrictivas para el sector de la restauración nocturna aunque los criterios no contentaron a todas las comunidades por igual. Uno de los ejemplos que más molestó fue depender del porcentaje de vacunados para poder abrir de nuevo, hecho que llevó a Díaz Ayuso y su gobierno a presentar un recurso contra lo acordado. La justicia dio ayer la razón al ejecutivo de Ayuso e impuso medidas cautelares contra las medidas del gobierno estatal, lo que ha provocado mover ficha a los restauradores nocturnos de toda España.

En esta ocasión, FECASARM ha pedido al nuevo ejecutivo de la Generalitat, con Pere Aragonès al frente, que presente ante el mismo tribunal un recurso para que en Cataluña se produzca la misma situación que en la Comunidad de Madrid. Para su secretario general, Joaquim Boadas, el nuevo gobierno catalán debe mover ficha porque “en su día ya apoyamos a la Generalitat en su acusación de que las medidas aprobadas por el Estado invadían competencias exclusivas de las comunidades y ahora la Audiencia Nacional se ha pronunciado en el mismo sentido de lo que argumentábamos” ha expuesto en un comunicado.

Boadas espera que si el estado no rectifica “la Generalitat haga lo mismo que Madrid, las impugne y pida su suspensión en Cataluña aprobando su propio plan de desescalada urgente” que para la patronal debe ser en San Juan. Esta fecha no es mera casualidad pues la consellera de salud saliente, Alba Vergès, ya deslizó en su penúltimo día al frente del departamento que sería el día elegido. El nuevo conseller, Josep Maria Argimon, enfrió las expectativas de reapertura y emplazó a debatir con la patronal y elaborar un plan conjunto sin día establecido. Además, la patronal ha pedido que se pueda volver a operar para evitar las imágenes que se ven en Barcelona cada fin de semana, con botellones y grandes aglomeraciones, desde hace cinco fines de semana sin estado de alarma ni toque de queda.

Este cambio de sentido en la estrategia de la noche de alinearse en los últimos días con la administración catalana supone el intento de dar mayor fuerza a una estrategia conjunta para que el sector pueda volver a trabajar lo antes posible. Además, la patronal sigue reclamando poder hacer un ensayo a gran escala en la ciudad de Barcelona tras el realizado en Sitges en mayo con más de 400 personas. Desde FECASARM se quiere juntar a más de 5.000 personas en 13 locales de la ciudad para demostrar que su labor es igual de segura que el resto. Esta idea ya contó con el beneplácito del Ayuntamiento de Barcelona aunque el cambio de gobierno en cCataluña provocó que todo se demorase sin un día establecido en el calendario.