Cónclave de ERC

Junqueras blinda la mesa aunque no esté Sánchez

Defiende ante JxCat que es la única vía y pide el aval internacional

Oriol Junqueras junto a Marta Rovira y otros dirigentes de Esquerra en Ginebra
Oriol Junqueras junto a Marta Rovira y otros dirigentes de Esquerra en Ginebraerc

A menos de dos semanas para la reactivación del diálogo entre la Generalitat y La Moncloa, varios de sus protagonistas recelan abiertamente de la mesa de negociación: Pedro Sánchez busca centrar la agenda del Gobierno en la recuperación económica y relega el «conflicto catalán» a un segundo plano, mientras que el partido de Carles Puigdemont lleva semanas cuestionando los plazos, los objetivos y su viabilidad en un boicot que no cesa. Sólo Esquerra defiende abiertamente el foro, y lo hace en un cónclave del partido en Ginebra con la presencia Marta Rovira y Oriol Junqueras, quien este jueves ha salido al paso de las últimas críticas y ha asegurado que ni la hipotética ausencia de Sánchez devalúa el diálogo.

«Ni para nosotros ni para la comunidad internacional que nos mira, la mesa no se devalúa en ninguna situación», ha argumentado al ser preguntado específicamente por la participación del presidente del Gobierno en la reunión que debe celebrarse en Barcelona a finales de la semana del 13 de septiembre, una condición que sí exige el president Pere Aragonès (ERC), quien se ha incorporado a última hora a la reunión de su partido por las inundaciones en Cataluña. Junqueras, por tanto, se desmarca y relativiza la presencia de Sánchez, aunque sí quiso mandar un avisó al Gobierno y reclama que «se lo tome en serio», que dé importancia al reinicio del diálogo.

Y es que el presidente del partido republicano ha insistido en su apuesta por la negociación de la amnistía y la autodeterminación, la «única» vía para Esquerra para lograr el aval de la comunidad internacional, un extremo que repitió en varias ocasiones sin ahondar en más detalles. «La comunidad internacional hará gestos en la medida en que actuemos con convencimiento y franqueza en la defesa de esta negociación», aseguró. Y luego ha remachado: la mesa de diálogo «es la mejor manera, la única manera, de obtener este reconocimiento internacional que es imprescindible para hacer la independencia de Cataluña».

Esta defensa de Junqueras, máximo líder de ERC al margen de Pere Aragonès, contrastan con los reproches de JxCat, y sirven de respuesta a las críticas de dirigentes como Quim Torra o la propia Laura Borràs. De hecho, Junqueras blindó el foro y su apuesta por el diálogo poco después de que la presidenta del Parlament desdeñara la mesa y la llegara a calificar de «alucinación colectiva» o «producto de marketing». «En realidad las veces que se ha reunido ha tenido escasos frutos, pero perseveramos en llamar algo como si tuviera una gran tradición», criticó la dirigente de JxCat en TV3.

Queda por saber también quién se sentará en el foro y si Junqueras podría acabar participando, algo en lo que no quiso ahondar: «Es muy poco relevante el papel individual que cada uno haga».